Elena Tablada concedió una entrevista en la que dibujó una relación 'tormentosa' junto a David Bisbal y, aunque el cantante aseguró que no entraría en esta guerra, su madre sí lo ha hecho: “Qué barbaridad ¿Qué necesidad tiene de esto?”. María Ferré ha desmentido que Tablada estuviera sola durante su parto y ha asegurado que su hijo estuvo al lado de su mujer en todo momento: “Le pusieron una cama al lado de la suya”.
Para ella, es "muy fuerte" que se digan todas estas “mentiras” y considera que la hija de ambos es la principal damnificada: “La niña va para mayor y no le viene bien”. Además, ha insistido en que Elena “no puede tener queja” del trato que ha recibido y ha recordado que cuando Bisbal la conoció, él ya tenía un Grammy y su casa de Miami comprada. “¡Qué lástima de mi hijo, madre mía! Con lo bueno que es y no lo dejan tranquilo”, se queja.
Pero sobre todo ha desmentido casi todas las acusaciones. María niega que Tablada tuviera prohibido hablar con el servicio, insiste en que la familia ni domina ni ha dominado nunca a David y tacha de falsa su presunta mala relación con Rosanna Zanetti (actual mujer del cantante). Ferré no entiende el porqué de tantas “barbaridades” y ríe irónicamente cuando la sombra de la deslealtad planea sobre su hijo: “¡Si la que salía en la revista con sus amigas y con unos y con otros era ella!”.
Por otra parte, ha comparado a Elena con su hermana, a la que aplaude por estar “siempre en su sitio” y ha criticado duramente a la diseñadora y a su madre: “Les gusta estar saliendo hasta en la sopa”. María insiste una y otra vez que su hijo está "muy enamorado" y hace público su único deseo: que la tormenta pase pronto "por el bien de la niña" que tienen en común.