Después de conectar con la ambulancia que va a trasladar a Kiko Matamoros al programa tras las últimas intervenciones, Jorge Javier mostraba a sus compañeros en el plató de ‘Sálvame’ las fotos de cómo había quedado el colaborador.
Las caras y los comentarios de cada uno de ellos eran un poema y lo decían todo. Jorge Javier nada más ver la primera foto se echaba las manos a la cabeza: “Fíjate que yo tengo tragaderas para estas cosas…”
Lydia Lozano no quería ni verlas y se levantaba de la silla asustada y con cara de asco: “No, no, no… ¡es que no es necesario! ¿Hay sangre?”. “Pero eso tiene que doler muchísimo…”, aseguraba la colaboradora al ver las fotos de su compañero.