Anabel Pantoja, preocupada ante el ingreso hospitalario de su padre: "En mi familia están todos al tanto y preocupados"
Tras ser dado de alta, una ambulancia tuvo que asistir a Bernardo Pantoja en su casa el viernes 11 de febrero
Desde entonces, el padre de Anabel Pantoja continúa ingresado en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla
Se trata de complicaciones por sus problemas de azúcar
Bernardo Pantoja está ingresado en Sevilla y su entorno muestra una "preocupación extrema" por su estado de salud. Así lo asegura Omar Sánchez en 'Sálvame' mientras Anabel Pantoja confirmaba el ingreso de su padre pero prefería no entrar en detalles.
Al parecer, hace tan solo una semana, el hermano de Isabel Pantoja fue ingresado y dado de alta, pero el viernes 11 de febrero una ambulancia le habría atendido en casa y, desde entonces, permanece ingresado en el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla.
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"Esa era mi preocupación", decía Anabel Pantoja en el plató de 'Sálvame' y es que ya había advertido que había algo más que le sucedía además de su separación de Omar Sánchez: "En mi familia están todos al tanto y preocupados".
Los problemas de azúcar de Bernardo Pantoja
Un testigo nos habla de su “aspecto desmejorado”, que se comenta que podría tener “afectados los riñones” y que el padre de la colaboradora de ‘Sálvame’ ingresó “muy mal”.
Junto a él están su pareja, Junco, y también Luis, al que se conoce como “Pinocho”, del que se dijo podría ser hijo biológico de Bernardo, una información que nunca se confirmó.
Afectada por la situación de su padre, Anabel Pantoja se tapaba la cara, emocionada, en el plató. Deja claro que si no está junto a su padre es porque tiene que trabajar para que, entre otras cosas, a Bernardo no le falte de nada y daba la gracias a Elio, la persona que está cuidando a su padre en el hospital y que para ella es crucial: “Me está ayudando, es mis pies y mis manos”.
Precisamente Elio nos contaba en directo que los problemas de Bernardo se deben de nuevo a cuestiones de azúcar y los médicos están haciéndole pruebas para ver si hay algo más afectado. Sin embargo, restaba importancia a su estado: “¿Qué se va a despedir de la vida? ¡Si se ha tomado un descafeinado con tres paquetes de galletas sin azúcar!”