Belén Esteban ha estado un mes sin hablarle a su íntima amiga, Anabel Pantoja, y la culpa la tienen unas joyas. Anabel tiene una línea desde hace años, de hecho todas las colaboradoras de 'Sálvame' las han lucido, y Belén acaba de lanzar su propia colección.
Trabajan con distintos equipos, pero para la misma empresa y la reacción de Anabel no se hizo esperar. Nada más ver en Instagram que Belén había lanzado su línea de joyas, decidió publicar varias fotos de las suyas.
Sin embargo, este enfado no es lo que ha motivado el conflicto entre las amigas. Y es que, según nos ha contado la propia Belén Esteban, el jefe de esta empresa habría alertado a Belén no solo del mosqueo de su amiga, también de sus quejas.
A la colaboradora le dijeron que la había acusado de quitarle toda la clientela así que Belén, dando crédito al jefe de la empresa, decidió no hablar con su amiga. Pasadas las semanas, el conflicto se descubrió en directo, Belén contó el verdadero motivo de su cabreo sin hablar antes con Anabel y la aludida, tras escucharla en la tele, intentó ponerse en contacto con ella por todos los medios.
Finalmente lo consiguió y hablando se entendieron: han engañado a Belén, Anabel nunca hizo esa llamada ni formuló esas quejás, aunque sí publicó enfadada las fotos de sus joyas. Así que Belén ha tomado una decisión, no quiere trabajar con gente que la engañe así que ha decidido dejar la marca con la que ya había colaboradora en otras ocasiones.
Y, tras el anuncio de su decisión, las colaboradoras vuelven a posar juntas en redes sociales como habían hecho hasta que comenzaran los problemas. Anabel sonríe, también Belén, y posan juntas con el mismo abrigo.
"Competimos hasta en el abrigo, pero no en amistad", bromeaba Anabel acompañando su texto de un corazoncito. Además, aprovechaba para lanzar un mensaje a quien inmortalizaba el momento: "Se nota que quien me hizo la foto, quiso patearme..." y con una carita roja, etiquetaba en la publicación a Kiko Hernández.