La primera parte de las memorias de Amador Mohedano afectaban a Rocío Carrasco y la segunda entrega a su exmujer, Rosa Benito. Sin embargo, la aludida se declara ajena a todo: “Ni veo ni leo ni quiero oír nada, me entero por vosotros, no tengo nada que decir, cada uno que sea feliz con lo que tiene y ya está”.