Omar, exconcursante de 'Gran Hermano 15', vive solo desde los 18 años, cuando falleció su abuelo. Trabajó durante algún tiempo pero también estuvo en el paro con lo que su situación económica fue difícil. Algunos de sus vecinos le reclamaban una deuda de 5.000 euros pero él, desde el plató de ‘Sálvame’, decía: “Ya no tanto, me lo he quitado casi todo”.
Asegura que lo mejor que se ha llevado de su paso por 'Gran Hermano' es su hermano, Alfredo, con quien no tenía relación. Sin embargo, parece que con su padre no ocurrirá lo mismo: “La primera vez que vi a mi padre fue cuando salí en la gala de ‘GH”, decía. Es más, aseguraba que si tuviera problemas económicos sería de las últimas personas a las que acudiría.
Antes de su entrada en el concurso, recibió la ayuda de sus amigos más cercanos: “Nunca he llegado a pasar hambre”, decía. Se definía como un “luchador” por lo que cuando Jorge Javier Vázquez le preguntaba si su pasado le había dejado huella, replicaba: “Lo he superado y cada día más, tengo ganas de vivir y conseguir mis metas”.
“La vida me está recompensando toda la mala suerte que he tenido desde que me quedé solo”, decía el exconcursante que aseguraba que quiere vivir con su chica, estudiar un grado superior de montador de estructuras de aeronaves y, a medio plazo, casarse aunque los niños tardarán más en llegar: “Todavía no estoy preparado”, decía.