Rosa Benito comunicaba que acudía al psicólogo para superar su crisis con Amador Mohedano.Esta información hizo pensar a Mila Ximénez que su compañera estaba informando de su crisis matrimonial por capítulos y, con sus palabras, el enfrentamiento estaba servido. Con el paso de los días, las batallas entre colaboradoras se recrudecían. Las acusaciones partían de ambos lados utilizando a miembros de sus respectivas familias, lo que a ambas les hacía estallar.
Tras el enfrentamiento más duro, Mila Ximénez regresaba a 'Sálvame diario' asegurando que 'Sálvame diario'ambas iban a sufrir "heridas de muerte" pero se mostraba dispuesta a la guerra. Eso sí, pedía a su compañera "juego limpio" en el que sus familias quedaran al margen de lo que entre ellas se dijeran. 24 horas después, ya con Rosa Benito en plató, los ánimos se calmaban.
La colaboradora empezaba el programa diciendo algo que, en parte, coincidía con lo expresado por Mila: "Si tenemos una guerra que sea entre nosotras dos y que no tengamos que meter a nadie que no trabaje aquí”, pedía, “no puede salir todo el mundo salpicado para hacerme daño a mí”. En cuanto a su cambio de actitud, Rosa negaba que le asesoraran y explicaba el porqué de su comportamiento: “a veces es esa gota que colma el vaso, explotas, ya intentas que esto no vuelva a pasar, que se metan conmigo pero para hacerme daño siempre meten a toda mi gente y es lo que yo veo injusto”. “Las dos fuimos a hacernos daño”, reconocía la colaboradora, “las dos somos muy impulsivas y creo que hablamos sin pensar, luego el daño ya está hecho”.
“Espero que sea una guerra de ella y mía”, decía Rosa y Mila desde plató, explicaba: “nos hemos tirado a matar, nos hemos hecho mucho daño ambas, esto va a ser una fractura difícil de soldar”. La colaboradora tomaba una decisión: “probablemente he quedado como el verdugo, ahora me voy a convertir en víctima, entiendo que mis actitudes la gente las entiende como de maldad”.
Para Ximénez, ahora es tiempo de sopesar lo sucedido porque “probablemente haya cosas que tenga que pedirle perdón, creo que es el momento de reflexionar. Pero ¿Están dispuestas las colaboradoras a continuar su particular guerra? Mila explicaba que si eso sucedía “ambas podríamos tener lesiones muy graves” pero ¿por qué? Porque ambas saben lo que más les duele.
Parecía que acercaban posiciones y Rosa quería dejar algo muy claro: "Aquí no hay ni malos ni buenos, hay reacciones de personas muy viscerales y vamos a hacer daño a lo que más nos duele, eso es lo que no tenemos que consentir".