Lucía Dominguín y el actor extremeño Carlos Tristancho se separaban a finales del año 2011 y ahora, según publica Vanitatis "se ha sabido que Rocamador, el hotel rural de cuatro estrellas ubicado en un antiguo convento de los monjes franciscanos y propiedad de ambos, ha cerrado sus puertas".
La publicación ha contratado la información con Tristancho quien aseguraba: "Hemos cesado nuestra actividad como muchos hoteles hoy en día, por culpa de la crisis. No ha sido por ellos por lo que hemos cerrado. De hecho, Lucía era y es el alma de ese hotel y sigue teniendo sus participaciones en él, algo que no ocurre con Miguel Bosé, pues dejó de ser accionista hace mucho tiempo".
Sin embargo, Vanitatis apunta que Rocamador "seguirá funcionando como lugar de bodas y banquetes" y cita de nuevo a Tristancho: "Se alquila como un favor y otra empresa se encarga del catering. En estos momentos, y hasta finales de agosto, estoy buscando un inversor, porque de otra forma, habría que vender el hotel".
"El negocio de los jamones Monsalud, en crisis"
Según publica también Vanitatis "El negocio de los jamones ibéricos de bellota del cantante, Monsalud Montánchez (…) Entraba en concurso voluntario de acreedores hace poco más de dos meses". Este proceso se debe "a la insolvencia" de la misma cuando "varias entidades financieras no renovaron las pólizas de crédito con la compañía Brumale -que comercializa los jamones con la marca Monsalud-".
Vanitatis explica que "ahora un juez ha dado el visto bueno a un plan de viabilidad, después de comprobar que la empresa se encuentra saneada salvo en lo que a financiación bancaria se refieres". Además, cita a las palabras del gerente de Monsalud: "Después de esa fase, toca convocar una junta de acreedores para explicarles el plan, a la que acudirá Miguel Bosé en calidad de presidente del consejo de administración y de presidente de la compañía (…) Miguel podría haberse desatendido de las obligaciones. Es accionista y, como tal, hizo una inversión cuyos beneficios no va a ver ahora. En su momento se llevó un gran disgusto, pero rápidamente entendió que el mercado es así y que hay que aceptarlo con serenidad".
El cierre del Museo de los Ángeles
Este museo es propiedad de Lucía Bosé. Según Vanitatis, las puerta ya se cerraron "temporalmente" en el año 2007. ahora, "sus puertas han vuelto a entornarse -no se sabe si de forma definitiva- por no encontrar apoyos económicos privados o públicos".
"No me ha quedado más remedio que cerrarlo porque ya no tenía dinero. Hay quien se lo gasta en whisky o en otras cosas. Yo me lo he gastado haciendo este museo de arte, que ha sido mi sueño. Pero desgraciadamente no me han entendido. Es más, tengo la sensación de que en este país me hubiera ido mejor con un museo de jamones. Si me toca la lotería volveré a abrirlo, pero de momento está cerrado temporalmente. Ahora bien, no me arrepiento de la inversión que hice. Lo digo en serio. Siempre he tenido claro que era mejor hacer un museo que un chalet", explicaba la propia Lucía en una de sus últimas apariciones públicas.