Con las altas temperaturas que nos acompañan estos días, lo que más apetece es algo fresquito. Un chapuzón en la piscina o el mar, un helado, una bebida bien fría… y una comida refrescante, ligera, con sabor a mar si es posible. Todo ello hace del bacalao fresco de Noruega el alimento perfecto para combatir al calor.
Ya solo la imagen de su carne blanca y jugosa es sinónimo de frescura, pero, además, se adapta a muchos de los platos más veraniegos que puedan ocurrírsete. ¿Cuáles? Hay muchos, desde el clásico a la gallega hasta innovadores tartares. Pero, desde luego, si de la época estival hablamos, hay que citar la barbacoa. O más bien la mar-bacoa, la versión marinera proveniente de los países nórdicos que está conquistando nuestro país.
“Las brasas son capaces de extraer todo el sabor del bacalao fresco noruego”, destaca Paula Monreal, la influencer culinaria. “Y lo mejor es que, directamente a la parrilla, o bien en papillote o a la tabla, el proceso es muy sencillo y lleva unos 20 minutos”.
Por eso, miles de españoles están integrando este pescado proveniente de las límpidas aguas noruegas en sus parrilladas, unas reuniones con amigos y familias que suelen producirse sobre todo en esta época del año.
Si el salmón ya es un clásico en todo tipo de ensaladas, el bacalao fresco de este mar no se queda atrás. Ya se prepare al horno o a la plancha, marida de manera maravillosa con unos buenos tomatitos cherry y unas hojas de albahaca, por ejemplo, o con aguacate y pimientos asados.
Recetas saludables y muy sencillas, pero sobre todo perfectas para los días más calurosos, por su alto contenido en agua y, por tanto, su gran poder hidratante.
La cocina asiática incluye una gran variedad de platos con pescado crudo, como el sushi o el sashimi. Unas opciones perfectas para combatir las altas temperaturas veraniegas. Y el bacalao fresco noruego representa una de las mejores maneras para darles una vuelta de tuerca creativa a estas elaboraciones tan tradicionales.
Puedes probar a hacer unos deliciosos makis con este pescado, pepino y aguacate, acompañados de salsa tártara.
¿Y cómo lo preparamos para incorporarlo a nuestra riquísima parrillada marítima? En el Cantábrico es bien conocido el bacalao a la brasa, muy simple: con patatas y cebolla.
Pero una salsa de ajo y perejil con limón como la que hoy te sugerimos puede resaltar su delicado sabor, así como la elaboración a la tabla de cedro. Otra opción es hacerlo en papillote, con mantequilla, espárragos y guisantes. En cualquiera de los casos, lo más importante es disfrutar… del proceso y del resultado.
Ingredientes (4 raciones)
Elaboración