La sentencia de malos tratos de Rocío Flores a su madre, Rocío Carrasco: las heridas que le hizo el 27 de julio de 2012
El documento relata el fatídico episodio del 27 de julio de 2012, cuando Rocío Flores tiró al suelo a Rocío Carrasco y le propinó varias patadas
La sentencia determina que la menor, que tenía entonces 15 años, llevaba tres años sometiendo a su madre a un “maltrato habitual y continuado”
“Tú dabas patadas a tu tripa cuando estabas embarazada de David” o “Eres una guarra, mi padre tenía razón” son algunas de las frases que le decía
El documental de Rocío Carrasco, ‘Rocío: contar la verdad para seguir viva’ ha supuesto un antes y un después en la historia de la televisión. Después de 25 años de silencio, la hija de Rocío Jurado ha contado cómo vivió ella su matrimonio y separación de Antonio David Flores y, ahora, para aclarar todas las dudas que haya podido tener el espectador, ha vuelto a sentarse en un plató de televisión.
Sin embargo, antes de su entrada, y ahora que su hija, Rocío Flores, le ha pedido desde ‘El programa de Ana Rosa’ que la llame y que hablen, este programa ha hecho público el documento que a Rocío Carrasco le hubiera gustado que nunca visto la luz: la sentencia de malos tratos que su hija ejerció sobre ella la fatídica mañana del 27 de julio de 2012. Una discusión por una nectarina que acabó, según dicta la sentencia, con Rocío Carrasco "tirada en el suelo y recibiendo las patadas" de su hija.
“Ese día Rocío me agredió y yo terminé en un hospital”
Según este documento, Rocío Flores, de 15 años, llevaba “tres años ejerciendo el maltrato continuado sobre su madre y dentro de su domicilio familiar”, dedicándole frases como: “Tú le dabas patadas a tu barriga cuando estabas embarazada de David”, “Eres una guarra”, “Eres una maltratadora psíquica y mi padre tenía razón”. Además, la sentencia enumera las heridas que Rocío Carrasco presentaba el día de la agresión física de su hija: tenía policontusiones en varias partes del cuerpo, como las muñecas o los muslos.
Cuando ha entrado en el plató, Rocío Carrasco ha empezado su entrevista hablando justamente de este tema. Su relato de aquella mañana ha sido escalofriante: “Aquella mañana Rocío me agredió, pero no era ella la que me pagaba, era su padre. Porque quiero dejar claro ya desde el principio que mi hija fue verdugo porque antes fue víctima de esa persona (Antonio David Flores). Y era muy vulnerable”.