Las míticas presentaciones de los solteros provocan una guerra total de 'zascas' y las primeras lágrimas de la edición

'La isla de las tentaciones' ya está de vuelta y, con ella, la llegada de todos los solteros y solteras que tentarán a las parejas de la que va a ser la octava edición. En el primer programa ya hemos podido conocer un poco a cada uno de ellos, e incluso hemos averiguado cuáles han sido las primeras impresiones al verles.

Sandra Barneda anunciaba que al fin llegaban las esperadas y ya míticas presentaciones. Uno a uno, todos los solteros y todas las solteras han ido avanzando por la pasarela para darse a conocer y, como era de esperar, han saltado las primeras chispas.

Las pullas entre parejas y solteros

Antes de vivir estas presentaciones, las parejas ya habían visto a las que van a ser sus tentaciones. Mientras se despedían en la playa para embarcarse en esta difícil aventura, un barco llegaba a la orilla. En él viajaban todos los solteros y solteras, que venían muy animados y haciéndose notar. "¡Se nota la preocupación desde lejos!", gritaban desde la distancia.

"Se escucha más a las chicas, cómo no… ¡Ojalá se caigan al agua!", decían ellas. "Ya se podía ahogar alguno", decían ellos. Acto seguido, tentadores y tentadoras saltaban al agua para llegar a la orilla mojados y mostrando sus cuerpos en bikini y bañador. Su llegada se convirtió en un continuo vaivén de pullas entre todos que terminó con las primeras lágrimas de la edición.

Los solteros llegan a Villa Playa

Tras despedirse de sus novios, las chicas recibían la visita de Sandra Barneda en la que va a ser casa las próximas semanas, Villa Playa. La presentadora charlaba un poco con ellas sobre sus primeras horas en el programa y, para terminar, daba paso a los tentadores con los que van a convivir.

"Muy guapos, les va el gym", decía Andrea al verlos aparecer y con las risas de sus compañeras como confirmación. Todas ellas le confesaban a la presentadora cuál era el que más les llamaba la atención por el momento.

Las solteras llegan a Villa Montaña

De la misma manera que había ocurrido en Villa Playa, Sandra Barneda visitaba Villa Montaña para compartir un rato con los chicos. Después de que la presentadora hablara con ellos de cómo estaban llevando sus primeras horas en la isla, daba paso a las solteras que les van a tentar.

Nada más verlas, Montoya parecía identificar a una de ellas: "Me suena…". Tanto él como Gerard coincidían en que eran "muy guapas". Sandra Barneda le preguntaba a Montoya qué ocurría: "La chica rubia de ahí me suena de algo".

Pero no era a ella a quien conocía, si no a su hermana, con quien guarda bastante parecido. Eso sí, Gerard sí que sabía quién era ella: "¿Érika Portillo se llama? A mí me suena de haber hablado por Instagram hace años".