"Cómo puedes estar tan nervioso, si son cuatro palabras", le dice Ruvens a Óscar, los dos en el helicóptero. "No está mal tener ilusión", protesta Óscar. Ruvens trata de explicarle que se refiere a que si está nervioso de más, no va a conseguir concentrarse: "cuando la gente te habla, no puedes estar a veinte cosas", le dice.
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Óscar y Ruvens de los nerviosMitele
Pero Óscar está de los nervios y Ruvens protesta: "Óscar, no me pegues tu ansiedad. Tu ansiedad no me pertenece, como diría Verónica Forqué".
"Ay, y tú estas muy impertinente por las mañanas. Guárdate tus malas formas, que esas a mí tampoco me pertenecen", devuelve Óscar. "Malas formas no he tenido", asegura Ruvens. "Haberte ido con otro en el avión", añade. "No quiero, ya lo sabes", le dice Óscar. "¿No sabes que soy insoportable por las mañanas?", cierra Ruvens. "Es pasar de mi cara simplemente", y le da la solución.