Pasar por estados depresivos es un gran mal de este siglo del que nadie puede sentirse ajeno. Nadie está libre de padecer depresión. El último en reconocer públicamente que ha tenido pasajes oscuros en su vida ha sido Jorge Javier Vázquez. El presentador, en una entrevista a ‘Lecturas’, ha contado que ha atravesado un proceso depresivo. "Sentí que todo en mi vida iba tocando a su fin y que ya no podía esperar nada más”, ha declarado el presentador.
No es el único que hace público haber pasado por ello. La presentadora de ‘Viva la vida’, Toñi Moreno, reconocía en ‘El programa del verano’, sorprendiendo a todos, que ella había padecido en el pasado una profunda depresión. "Yo sufrí una, por ejemplo, y no tenemos que escondernos. Tenemos que hablarlo", confesó la comunicadora.
También uno de los rostros más enérgicos de la televisión ha pasado por un momento duro en su vida como es vivir una depresión. Hablamos de Mercedes Milá que aprovechó su visita a ‘Sábado Deluxe’ para promocionar la segunda temporada de su programa literario, ‘Convénzeme', y así abrirse en canal.
Fue allí donde Milá comentó sin pelos en la lengua que sufrió depresión. La periodista admitió que llegó un momento en el que lloraba, no dormía y sufría ansiedad por todo. Estaba metida en un “agujero negro” del que ella misma decidió salir: “Lo primero fue decir ‘hasta aquí’. Reconocer los límites, que estás mal, que estás enferma, que por la razón que sea no eres la misma persona que tú creías que eras, que tu cabeza no te responde”, confesó en pleno plató.
Rosa Benito es otro de los personajes de Telecinco que hicieron pública su enfermedad. En concreto fue su hermana Geles la que intervino en el programa donde colaboraba su hermana para decir: “Mi hermana, realmente, no está bien”. El bajo estado de ánimo que iba coleando en Benito, desde que se separó de Amador Mohedano, se confirmó con su ingreso en un psiquiátrico.
Paz Padilla también tuvo un momento muy triste como ella misma ha confirmado tras la separación de su primer marido y padre de su hija, aunque no podemos confirmar que fuera depresión o un momento duro y difícil de gestionar a nivel emocional.
Fue en ‘Mi casa es la tuya’ donde la presentadora contó que "mi marido me dejó de un día al otro, y lo pasé muy mal. Me dijo que a él se le había apagado el amor, pero yo estaba profundamente enamorada", añadiendo posteriormente que "lloraba mucho, pero nunca le dije que aún le quería cuando cortamos. Llevábamos 7 años juntos. Cuando venía a por la niña, me maquillaba y le contaba chistes, para mostrarle que estaba bien, pero cuando cerraba la puerta me hinchaba de llorar otra vez".
Porque se sale y porque precisamente ellos son un ejemplo claro de que hay muchas razones para seguir luchando, sus testimonios pueden servir de mucho a personas que estén pasando por ello.