Marta López está desesperada con las obras de su casa. La colaboradora de 'Sálvame', que ha decidido hacer una reforma completa de su hogar, ha reconocido haber llegado a su límite con este largo proceso de reparación que se ha alargado más de lo deseado. La que fuera concursante de 'Gran Hermano' ha grabado un vídeo en el que además de mostrar el interior de su domicilio, ha enseñado la realidad de la situación que está viviendo.
Ni dos ni tres ni cuatro, un total de diez personas son las que hay dentro de casa de Marta López encargándose de las obras de reparación completa de su casa, donde se está llevando a cabo la restauración del suelo y la instalación de nuevas puertas.
"Qué ilusión, ya me están poniendo las puertas. No sabéis lo que se echan de menos sobre todo cuando vas al baño…llevo no sé cuántos meses sin puertas", ha confesado la televisiva, que ha querido hacer partícipes a sus seguidores de este momento clave en su vida.
Un proceso de chapa y pintura que ha provocado que la colaboradora de 'Sálvame' esté viviendo estas últimas semanas en una jauría de cajas, muebles patas arriba, herramientas y mucho polvo. En una serie de divertidos vídeos en los que podemos verla deambular por su casa, completamente empapelada y ocupada de extraños, la televisiva ha aprovechado para mostrar a sus seguidores todas y cada una de las habitaciones que componen su hogar: desde el recibidor, pasando por el salón y los baños, hasta las habitaciones de sus hijos.
Aprovechando este desastre organizativo, Marta López ha visto la ocasión ideal para cambiar de colchón. "Mirad lo que me ha llegado, esto ya va pareciendo una casa", ha celebrado la colaboradora de 'Sálvame' mientras estrenaba su nueva cama ante la atenta mirada de sus seguidores.
Y es que la televisiva se ha hecho con un comodísimo colchón de 200x200 metros con canapé valorado en más de 4.000 euros. Se trata de un modelo que ofrece la combinación perfecta entre firmeza, adaptabilidad y transpirabilidad con efecto descontracturante gracias a su visco de 90 kg.
Una etapa de transición que, aunque viene cargada de cosas positivas, tiene un tanto agotada a la cacereña, que ha tirado de humor para retransmitir esta situación a través de su perfil oficial de Instagram. "Tengo la casa llena de polvo y de gente. Estoy desesperada con la obra", comenta la colaboradora de 'Sálvame' mientras hace malabares entre las cajas y va esquivando obreros para grabar contenido para sus redes sociales.