79 años y toda una carrera de éxitos profesionales. La comunicadora que hizo historia con su mítico ‘Día a día’ está de celebración por su cumpleaños a pesar del ‘annus horribilis’ que ha marcado sus últimos seis meses. Repasamos el detalle que ya ponía de manifiesto que la relación entre María Teresa y Bigote hacía aguas hace un año. Un punto de partida, hace justo un año, que daba el pistoletazo de salida de una series de malas noticias que han marcado este 18 de junio de 2020 y que también analizamos.

Si tiramos de carrete, hace 365 días todo apuntaba a que el próximo cumpleaños de la matriarca del clan Campos sería diferente. ¿Por qué? Pues porque el año pasado la periodista organizó con sus hijas y su nieta un almuerzo en un restaurante de Madrid para celebrar los 78. Una quedada a la que no acudiría Edmundo Arrocet, que llevaba un tiempo fuera de España.

La Campos lo disculpó ante los medios y una vez llegó el verano pudimos ver como su novio aterrizada en Málaga y ella lo recibía con los brazo abiertos. Pero lo rumores de ruptura llegaron para convertirse en una realidad a finales de año de 2019. Un duro golpe que ella no se esperaba y que la ha dejado sola con sus hijas y sus nietas, tal y como estaba el año pasado por esta misma fecha.

Con la llegada de 2020, el estado de alarma y el confinamiento con su hija Terelu, la situación no ha mejorado tras la ruptura con el que fuera su novio durante varios años. A estas circunstancias especiales hay que añadir que su hija Carmen Borrego padeció el coronavirus aunque ya está recuperada. Desde la separación con Edmundo Arrocet hasta la llegada de la pandemia, con el contagio de su propia hija Carmen Borrego, os detallamos el calvario que ha pasado María Teresa Campos. Una mala época que parecía empezaba con la ausencia de Bigote en su anterior cumpleaños.

La noticia se conoció en diciembre de 2019. La ruptura entre el cómico y la comunicadora era un hecho tras una relación que comenzó en el año 2014. Los rumores de distanciamiento que venían coleteando desde su último cumpleaños se hacían realidad con la llegada del otoño.

Fue en una entrevista a ‘¡HOLA!’ cuando la malagueña manifestó cómo se encontraba después de que Edmundo se fuera de casa. “He llorado mucho porque él era mi compañía. Mi amigo, mi amante, mi todo”, explicaba una dolida María Teresa.

Acompañada de su hija Terelu. Así ha vivido Teresa el confinamiento obligado por la alerta sanitaria por el coronavirus. La Campos no ha tenido contacto con nadie del exterior y si alguien entraba en casa de su hija, ella se marchaba a otra parte de la vivienda.

Un aislamiento total e inesperado que ha sido muy duro para la veterana comunicadora. La presentadora confesó en una entrevista en ‘Todo es mentira’ incluso que rezaba y que en ocasiones se encomendaba a la beata Petra de San José. En el perfil de Instagram de su hija Terelu la hemos visto en pleno confinamiento:

Y si fuera poco esta situación extraordinaria provocada por la COVID-19, su hija Carmen Borrego se contagiaba de coronavirus en plena pandemia. La pequeña de las hijas de la presentadora ha vivido la enfermedad con dureza y muy afectada. Unos días de cuarentena que ha tenido alejada a Borrego de su hermana Terelu y María Teresa durante muchas semanas.

Un año de malas noticias para María Teresa Campos que empezaba con la ausencia de Bigote en su cumpleaños pasado y que ha marcado los meses venideros. Después la ruptura con el que consideraba el amor de su vida, la pandemia global y la enfermedad de su hija han provocado que la periodista cumpla 79 años con una media sonrisa.