A sus 46 años Carolina Ferre, una de las presentadoras icónicas de los 2000’s de Telecinco, continúa deslumbrante, con su eterna sonrisa y trabajando en televisión, ese medio que se ha convertido en su compañero de vida. Pero además es mamá de tres hijos pequeños, se defiende como twittera crítica, una defensora de la República y se autodenomina una “influencer mal”. Os contamos qué fue de la periodista telecinquera…
Con motivo del documental ‘Rocío: contar la verdad para seguir viva’, la alicantina regresaba a las pantallas de la que durante años fue su casa, al recuperar un breve fragmento de uno de los programas de ‘Día a día’, el magazine que presentó y donde compartía mesa con Antonio David Flores.
Hay que recordar 2004 se puso al mando de ‘Día a día’, sustituyendo a María Teresa Campos como presentadora. Desde entonces hasta ahora, su vida ha estado ligada a la televisión, un medio que le ha dado múltiples alegrías y en el que aún sigue participando a nivel regional, presentando programas de la cadena pública valenciana. Recordamos su época televisiva antes de contar su vida actual:
Fue en el año 1999 cuando una jovencísima Carolina Ferre se estrenaba a nivel nacional en televisión presentando ‘Fiebre del domingo noche’ junto a Juan y Medio. Desde entonces, su carrera profesional despegó y continuó siendo un rostro conocido de Telecinco. Entre sus éxitos televisivos se encuentran ‘A tu lado’, donde en 2003 sustituyó a Emma García, o su participación presentando los resúmenes de la quinta edición de ‘Gran Hermano’ y los debates de ‘GH VIP’.
Precisamente, con motivo del 30º aniversario de Telecinco, publicaba un emotivo texto en redes sociales agradeciendo a la cadena haberle brindado muchos de sus mejores momentos: “Fui feliz en tus camerinos, en la sala de maquillaje y en vestuario. También en el plató de ‘A tu lado’, ‘Día a Día’, ‘GH’, ‘GH VIP’, ‘La Cocina del Infierno’, ‘Plan C’ y ‘Pasapalabra’. Contigo presenté mis primeras Campanadas y entrevisté a mi ídolo Miguel Bosé”. Así se refería a la que, en sus propias palabras, fue su casa durante varios años.
Su momento fetiche: las campanadas de fin de año
Como ya hizo en Telecinco allá por 2003 junto a Manel Fuentes, la alicantina ha vuelto a aparecer en televisión para dar la bienvenida al año nuevo junto a los valencianos que decidieron comerse las uvas a su lado en las últimas nocheviejas.
Así de guapa e ilusionada veíamos a Ferre, preparada para desear un feliz año nuevo a los telespectadores de la cadena pública valenciana.
Es en redes sociales donde se siente cómoda para hablar con sus fans. Con total cercanía comparte ese detrás de cámaras mientras trabaja o expone momentos de su vida personal con los límites oportunos para no romper la barrera de lo privado.
Su lado más íntimo se descubre a través de su perfil de Instagram. A corazón abierto, Carolina saca su vena literaria para escribir unos textos maravillosos con los que, especialmente en estos tiempos de pandemia, anima a sus seguidores a seguir adelante. En una de sus últimas reflexiones escribía: “Queda mucho por vivir. Debemos luchar. Y reír, de vez en cuando, ¡con fuerza!”
En su cuenta de Twitter comparte ¡de todo! Momentos estelares de su programa, recuerdos de antaño, anécdotas graciosas y no tiene ningún reparo en mostrar de qué lado cojea en cuanto a política se refiere. Parece que la pierna de Ferre que marca el paso es la izquierda, y es que en alguna ocasión a criminalizado a Vox o criticar a la extrema derecha.
Incluso, el pasado 14 de abril, aniversario de la proclamación de la Segunda República Española, aprovechaba para reclamar la tercera en cuestión mediante un sutil tweet:
Entre una opinión sobre la actualidad, una reflexión poética y el autobombo de su programa de televisión, Carolina nos deleita con imágenes cotidianas. Entre ellas, lo que más disfruta mostrando de su vida privada es a sus hijos. Madre de tres (dos de ellos mellizos), a ella le encanta presumir con orgullo de las vidas que trajo al mundo junto a su marido, el publicista y realizador Yuri Alemany.
Su vida con Adriá, Tomeu y Paulina es el de una madraza que lo da todo por ellos. Los más pequeños este año cumplirán sus 7 años y a ella se le sigue cayendo la baba al verles jugar o, simplemente, disfrutar de la vida.
Al final, la naturalidad de Carolina Ferre en sus redes sociales es el más fiel reflejo de cómo es ella. Mantiene la frescura de sus primeros días, continúa con esa sonrisa tan sincera y característica, y disfruta compartiendo su vida con aquellos que comenzaron a seguirla en sus inicios en el año 99 y aún siguen fieles. Como ella se define, una suerte de “influencer pero mal” que nos encanta.