Patricia Montero y Álex Adrover se casan por el rito 'yogui': tres días, tres vestidos, cata de vinos y paella
La pareja, que se casó en el Cabo de Gata, organizó una cata de vinos muy particular y una clase de yoga que celebraba el amor
Entre los 70 invitados estaban las dos hijas de la pareja: Lis y Layla, de nueve y cinco años
Patricia Montero y Álex Adrover llevan 16 años juntos y se conocieron en la serie 'Yo soy Bea'
Campanas de boda para la actriz Patricia Montero y Álex Adrover… o mejor dicho, posturas de boda. La pareja de actores, de 36 y 45 años, que se conocieron en la mítica serie 'Yo soy Bea', han decidido darse el esperado 'sí, quiero' con una original ceremonia centrada en el mundo del yoga y cargada de espiritualidad que han celebrado en el Cabo de Gata (Almería).
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Una boda de tres días para celebrar 16 años de amor
Para celebrar su enlace, la pareja de guapos -que llevan juntos más de 16 años, se conocieron grabando para Telecinco la serie ‘Yo soy Bea’- han reunido en el emblemático parque natural a sus mejores amigos y a sus dos hijas: Lis, de nueve años y Layla, de cinco. Los festejos se han prolongado durante tres días y el planning de actividades ha sido tremendamente intenso.
Patricia ha colgado en sus redes sociales algunos momentos de las celebraciones junto a un hermoso texto: "Una mirada con los ojos en lágrimas, unas palabras con la voz quebrada para comprometernos nuevamente a 'volver a empezar/START OVER' o un 'SÍ, QUIERO' para entendernos más", ha escrito.
Un plan de actividades muy original
El programa de festejos dio el pistoletazo de salida el pasado jueves: Patricia y Álex ofrecieron a sus más de 70 invitados ofreciéndoles un cóctel y una actividad denominada 'winedinski', que consiste en una cata de vinos muy particular ya que mientras se disfrutan los caldos los participantes elaboran un cuadro de pintura fluorescente. Esa misma noche todos realizaron una alocada reunión de tuppersex.
El día siguiente las actividades prosiguieron su curso: la pareja programó para sus amigos una clase de yoga a la que titularon ‘Círculo del amor'. Para que el crecimiento interior se potenciase en el exterior continuaron con una sesión de belleza y spa que culminaron con un plan más tradicional: una comilona en un restaurante en el que degustaron de una paella. Esa misma noche bailaron sin fin en una preboda que se prolongó hasta bien entrada la madrugada.
El día grande tuvo lugar el sábado, fecha oficial del enlace. La pareja se dio el “sí quiero” en una ceremonia alternativa al aire libre en el que no faltaron referencias a los elementos, principalmente el mar y la tierra. El evento estuvo amenizado por el músico Miquel García, que se encargó de poner la banda sonora a la entrada de los novios.
Las celebraciones culminaron con una fiesta celebrada en una finca rural de la zona. El evento estuvo plagado de momentos cargados de emoción y sentimientos como cuando sus familiares y amigos recordaron públicamente algunas anécdotas de la pareja.
Los tres vestidos de Patricia
Y ahora, la gran pregunta: ¿cómo vistieron los novios en esta celebración tan particular? Patricia Montero lució tres modelitos, todos ellos firmados por Pronovias: uno para la preboda del viernes y otros dos para el sábado: uno para la ceremonia y otro para la fiesta.
El conjunto de la preboda estaba confeccionado con encaje de guipur y forrado en gasa. Para la ceremonia, Patricia optó por un vestido lleno de transparencias y encajes bordados con silueta de sirena de más de tres metros y cuello halter y espalda al aire.
El conjunto de la fiesta recordaba al viejo Oeste: drapeado en gasa, con escote pico y espalda al aire. El novio, por su parte, también se casó de blanco con un traje de la marca Mansolutely, la misma que vistió a Antonio Rossi en su reciente enlace.