La guerra de Diego Matamoros contra Makoke lejos de apagarse vuelve a estar más viva que nunca. Y es que a raíz de las últimas declaraciones de la ex de su padre en el diván de 'Viva la vida', el hijo del defensor de la audiencia de 'Sálvame' ha dado una contundente respuesta a cada una de las declaraciones en las que se ha visto afectado.
En relación al apelativo de "sinvergüenza" que le dedicaba Makoke por el odio y rencor que Diego ha proyectado sobre ella, el hijo de Kiko Matamoros aprovechaba ese término despectivo utilizado en la entrevista y con la RAE en la mano le devolvía otro ataque de especial dureza.
"Según la RAE un sinvergüenza es un inmoral, te puedo definir lo que es un inmoral, el que se mete en una familia, separa a los hijos del padre, malmete al padre contra los hijos, al final pone los cuernos a su pareja, te podría contar muchas cosas de estas " y terminaba la definición de este concepto con otra situación también aplicable a la actuación de Makoke con su padre y que pasa por ser "una persona que factura dinero que no es suyo a través de una empresa... ".
Diego Matamoros también aprovechaba el momento para opinar de la nueva novia del padre, Cristina y augurar que "la relación no tiene pinta de duradera", pero a pesar de ello Makoke volvía ser el objetivo de sus críticas y se animaba a disparar con el cañón cargado afirmando que no había nada peor que ella: "es como vivir con el diablo, lo peor que te puedes echar en la vida".
Y, aunque Diego admitía que por los últimos enfrentamientos del padre con Makoke en televisión este había acabado por darle la razón en lo que llevaba contando él más de cinco años sobre la que era su madrastra, eso no ha supuesto ningún acercamiento entre el padre y el hijo y de hecho en ese punto Diego se muestra rotundo y afirma que "no hay punto de retorno y creo que será así de por vida".
Sin ser tan drástico, pero sin visos de una posible cercanía hasta la fecha, Diego Matamoros abordaba también el actual enfrentamiento con su hermana Laura para terminar diciendo que "si hace mal las cosas tiene que pedir perdón y currárselo ella" como siguiente paso a dar para conseguir el esperado acercamiento entre hermanos.