María José Campanario ha decidido abrir sus redes sociales y compartir con el mundo algunas facetas de su vida privada. Desde que tomara esta importante decisión, que afecta directamente a su privacidad, la mujer de Jesús Janeiro no ha dejado de publicar contenido relacionado con su vida más íntima. A través de su perfil de Instagram - el cual no deja de acumular seguidores-, la odontóloga hace partícipe a su comunidad de seguidores de su día a día. Hasta el punto de revelar el original apodo que utiliza para referirse a Jesulín de Ubrique.
A través de sus historias temporales de Instagram, la madre de Julia, Jesús y Hugo - tres de los cuatro hijos del diestro - , ha querido compartir un momento aparentemente cotidiano con su marido. Una fotografía en blanco y negro en la que ambos aparecen en el coche. De fondo, suena el tema Que nada nos pare, del grupo La, La, Love You.
En esta estampa podemos ver al gaditano muy concentrado, conduciendo por la carretera, mientras la odontóloga se hace un selfie e inmortaliza este momento con su teléfono móvil.
"Con mi lobo de mar", escribe María José junto a esta fotografía, en la que aparece tremendamente feliz y sonriente. Unas palabras con las que la sanitaria desvela la original y cariñosa manera que tiene para referirse al que también es padre de Andrea Janeiro, la hija de Belén Esteban.
El hijo de Carmen Bazán y el difunto Umberto Janeiro lleva 21 años casado con Campanario. Recientemente, la pareja daba la bienvenida a su tercer hijo en común.
Su relación en estos momentos parece encontrarse en uno de sus mejores puntos; tanto es así, que tras años huyendo de la prensa e intentando que su vida privada fuese lo más hermética posible, han decidido pasarse al mundo de las redes y compartir su día a día con millones de personas.
Pero María José Campanario no ha sido la única que ha sorprendido revelando con este inesperado gesto el apodo con el que se refiere a su marido. El propio Jesulín también lo ha hecho. "Quiero, Minina", ha sido la respuesta del taurino, que no solo hace pública la tierna manera con la que llama a su mujer, sino también una romántica declaración de intenciones hacia la madre de sus tres últimos hijos, con la que está dispuesto a continuar disfrutando al máximo de la vida, sin que nada en la vida, como dice la canción que escuchan, les detenga.