Violeta Mangriñán acaba de comprarse su segunda casa en propiedad, la primera en Madrid. La exconcursante de 'Supervivientes' cumple un sueño con la compra de esta vivienda, cuyos gastos pagará ella sola de manera íntegra. Preguntada por sus seguidores y tras insinuarse que el padre de sus hijas era un 'mantenido', la extronista de 'Mujeres y Hombres y Viceversa' explica el motivo por el que Fabio Colloricchio no colabora en en la compra de su nueva casa.
La influencer, que desde que abandonase Villa Favioleta y regresase a la capital ha estado buscando la casa de sus sueños para no tener que hacer frente a los "abusivos precios de los alquileres" de Madrid, ha hablado en más de una ocasión de su millonario patrimonio.
Gracias a su trabajo en redes sociales, colaboraciones con marcas, su cafetería y otros proyectos, Violeta Mangriñán ha conseguido amasar toda una fortuna que a nivel patrimonial crece ahora con la compra de este espectacular chalet de 380 metros cuadrados construidos y 1000 metros cuadrados de parcela.
"Tanto mi casa de Valencia como esta de Madrid son las dos mías. Solo mías", insiste la valenciana, que aprecia cierto machismo en las críticas que recibe.
Con sus redes, Mangriñán podría facturar fácilmente más del doble que su pareja, que se dedica fundamentalmente a la música y a su carrera artística. "No sé por qué a la gente esto le extraña, seguramente si fuesen de Fabio o las hubiese comprado solo él no sorprendería tanto", explica mientras niega que el papá de Gala y Gia esté viviendo de sus ingresos.
Como ha ocurrido hasta ahora, será el italoargentino el que se costee con su dinero sus propios caprichos. Esto no implica que no aporte nada a la economía familiar, pues como ha ocurrido hasta ahora, contribuirá a los gastos comunes de la vivienda aunque su nombre no figure en las escrituras.
"Él y yo tenemos economías separadas desde que empezamos nuestra relación y así seguirá siendo", comenta haciendo referencia a su historia de amor, que comenzó hace cinco años y medio en 'Supervivientes. Violeta Mangriñán no ha dudado en incidir en esta idea de separación de bienes, que mantiene desde entonces y mantendrá "incluso si algún día nos llegásemos a casar".
La creadora de contenido, propietaria a la edad de 30 años de dos inmuebles de lujo en nuestro país, ha confesado además que ella no es la única que tiene dinero invertido en el ladrillo. En este sentido, y aunque las casas de España estén exclusivamente a su nombre, ha desvelado que Colorrichio también tiene "dos pisos en Argentina", su país natal. "Su idea es venderlos cuando sea el momento e invertir aquí en España. Si algún día Fabio se compra algo en España seré yo quien se vaya a su casa a vivir", ha asegurado.