Un Tribunal Popular juzga desde este lunes a un hombre al que la Fiscalía acusa de un delito de asesinato, tres delitos de lesiones y uno de incendio en casa habitada por, supuestamente, provocar fuego en una finca de Valencia en el que murió un niño de tres años y resultaron heridos su madre y sus dos hermanos, también menores de edad.
La Fiscalía y las acusaciones particulares piden para el acusado, Rafael, prisión permanente revisable, una indemnización para los padres de 200.000 euros por el niño fallecido y 25.000 euros por cada uno de los otros dos hermanos heridos.
Por su parte la defensa pide la absolución al negar los hechos. "Vamos a luchar por la libertad de mi cliente. La persona que provocó el incendio está en libertad", señala Francisco Bernal, abogado defensor.
En la primera sesión de la causa, el acusado se ha declarado no culpable. "Yo no prendí fuego a los muebles ni subí a la casa", ha declarado. Por su parte, su abogado ha explicado que el incendio pudo haberlo provocado otra persona por un ajuste de cuentas relacionado con un tema de drogas.
El hombre ha explicado que sufre un trastorno de personalidad por el que tiene que medicarse para evitar tener brotes psicóticos. Respecto al día de los hechos ha señalado que "pensaba que mi exmujer podría volver conmigo. Intenté hablar con ella aunque no tuvimos ningún tipo de contacto". Además, ha reconocido que estuvo esperando a la mujer en un bar frente al edificio donde "bebió cerveza, unos chupitos de anís y fumó marihuana".
El acusado ha asegurado que, a continuación, abandonó el lugar y se marchó al barrio de Nazaret, donde fumó marihuana y se quedó a dormir en su furgoneta. Al día siguiente, ha afirmado que regresó a la calle donde residía su expareja para verla, pero no la localizó, por lo que regresó a Murcia sin enterarse del incendio.
Por su parte, la acusación particular le ha preguntado si había amenazado anteriormente a su expareja, con la que había mantenido una relación de 20 años, y si llevaba gasolina en una furgoneta, el hombre lo ha negado.
Este lunes también han declarado los padres del menor fallecido. La madre ha explicado que ese día acababan de volver del colegio cuando se declaró el incendio y que intentaron refugiarse en la terraza. La mujer ha declarado que se enteró de la muerte de su hijo pequeño cuando despertó en el hospital.
El jurado popular deberá decidir si el 10 de diciembre de 2020 el procesado acudió a una finca de la Malvarrosa (Valencia) en la que pensaba que vivía su expareja sentimental, cuya relación había finalizado un mes antes.
Según la Fiscalía, una vez en la puerta del edificio, el hombre habría intentado contactar con la mujer, que se habría mudado poco antes, sin decírselo al procesado.
El jurado determinará si, en un momento de la tarde y con la intención de hacer daño y amedrentar a su expareja, el hombre se coló en la finca, subió hasta la cuarta planta y prendió fuego a unos muebles que se encontraban junto a la puerta del piso en el que creía que aún vivía la mujer.
El fuego provocó un incendio de grandes dimensiones en todo el edificio. Los bomberos rescataron a las cuatro víctimas, tres menores de tres, siete y nueve años, y a la madre de los niños de 39 años. Todos ellos fueron encontrados inconscientes en el rellano de la planta donde residían y trasladados al Hospital La Fe.
El niño de tres años, que se encontraba en estado crítico tras el incendio, falleció en el centro hospitalario a pesar de los intentos de reanimarlo de los médicos. Sus dos hermanos y su madre sí que recobraron la consciencia y pudieron salvar la vida.