Alrededor de 70 gatos de múltiples razas y características habitan en una vivienda de la Calle Senyera, en Valencia. Un número excesivo de estos ejemplares que hace difícil la convivencia común, y por eso los vecinos han denunciado esta situación insalubre ante la justicia.
Aseguran que no pueden abrir las ventanas por el fuerte olor del orín de los felinos y que han tenido que poner ambientadores en los rellanos. “Hay días que entras al patio y te dan arcadas”, señala un vecino.
No es la primera vez se quejan de lo que ocurre en el edificio, afirman que llevan años “aguantando” y que lo han intentado todo, empezando por hablar con la dueña de los animales, sin ningún éxito.
También en 2017 presentaron una queja en Ayuntamiento de Valencia, denunciado la falta de higiene y los malos olores, pero no han obtenido ninguna solución.
La situación no ha mejorado y por eso han decidido ponerlo en manos de la justicia. Además, el paso del tiempo hace que cada vez haya más gatos en la vivienda, pues, según cuentan los afectados, los animales crían sin ningún control y esto hace que el problema se vaya acrecentando.
La Ley establece un máximo de cinco animales domésticos por domicilio, por el bienestar de estos y de las personas que cuidan de ellos.
Desesperados estos vecinos, han decidido hacer pública la “situación insostenible” que están viviendo y claman por una solución que les permita acabar con el problema.