La polémica saltó esta semana cuando una jueza de Vitoria se negó a que unos padres pusieran a su hija el nombre de Hazia. Un nombre que en euskera significa "semilla", pero que también se utiliza en lengua coloquial vasca como "semen".
Precisamente, por esta última acepción, la magistrada adujo que el nombre tenía "connotaciones negativas" e inscribió a la pequeña con el nombre de Zia porque “resulta fonética y semánticamente equivalente al inicialmente solicitado”.
Una decisión que ha indignado a los padres de la bebé, que aseguran que van a llegar hasta el final para reparar lo que consideran una injusticia.
La decisión de la jueza contrasta con el hecho de que en España hay 93 hombres llamados Semen, 27 de los cuales están en la provincia de Alicante, la que cuenta con mayor número de vecinos con este nombre.
En estos casos, los magistrados no pusieron ningún reparo a que los padres inscribieran así a sus hijos.
Según las estadísticas publicadas en el Instituto Nacional de Estadística, la edad media de los varones llamados Semen tienen una media de edad de 26,9 años y se encuentran en las provincias de Girona, Barcelona, Valencia, Alicante, Murcia y Málaga.
Un nombre que alcanzó su máxima popularidad en la década de los 90, cuando 24 parejas decidieron ponérselo a sus hijos. En la primera década de los 2000, se registraron otros 20 Semen, igual que entre 2010 y 2019.
La primera vez que aparece este nombre registrado en las estadísticas del INE es en los 50, con 6 casos. En los 60 bajo hasta 5 y en los 80 subió hasta los 13.
Pero Semen, no solo es un nombre, también 8 españoles lo tienen como primer apellido.