Se llama Roma, tiene un año y vive gracias a un trasplante
Vanesa no se separaba de su hija Roma. Con tan solo 8 meses recibió un trasplante de hígado. En otra habitación del mismo hospital, el Vall d'hebrón de Barcelona, se recuperaba Naroa, 13 años. Para ambas la salvación fue un mismo donante, también menor, y una técnica compleja para dividir el órgano y de manera simultánea trasplantar cada fragmento en cada una de las niñas.
Siete meses después Roma ha dado un cambio impresionante. Lo dice su madre "no para, se sienta, se sostiene, ya no tiene los terribles picores que le ocasionaba la enfermedad. Come". Y lo vemos nosotros. Roma es una niña como cualquiera de su edad inquieta y curiosa con lo que le rodea. Es el objetivo de una cirugía como la de los trasplantes, que mueve equipos multidisciplinares en un proceso bien engranado.
Es una de las más de 5.000 personas que recibieron un trasplante de órganos gracias a la generosidad de 2.243 donantes. Un año en el que la ONT ha vuelto a batir su propio récord y revalida el liderazgo mundial en trasplantes. Una actividad que ha supuesto una media de 14 intervenciones diarias en los hospitales españoles. Roma vive su oportunidad. Hay 88 menores que esperan la suya en un trasplante.