Josefa y Rafael han tenido este viernes un funeral conjunto en Burgos por expreso deseo de ambas familias. La hija de esta pareja ha negado que su padre fuese un maltratador a pesar de que mató presuntamente a su esposa de un disparo y dejó herido a su hijo menor tras lo cual se suicidó en la vivienda familiar del municipio burgalés de Villagonzalo.
Tras la ceremonia religiosa, que ha tenido lugar en el tanatorio de San José de la capital burgalesa, los féretros han sido trasladados en comitiva en dos vehículos y acompañados por multitud de amigos y familiares hasta el cementerio de San José dónde también han sido inhumados en la misma sepultura.
El pasado miércoles la hija mayor de Josefa y Rafael halló los cadáveres de sus padres y el cuerpo inconsciente de su hermano con una herida de bala en el cuerpo. Según la investigación, Rafael habría les habría disparado con su escopeta de caza matándola a ella y dejándole a él gravemente herido, tras lo cual se suicidó.