“La mujer que sufre violencia de género no es una víctima, es una superviviente”
Salir de la violencia de género no es fácil pero es posible. No es raro que una mujer que habitualmente sufre malos tratos vuelva a tener otra relación con violencia machista, nos explica Yaiza Muñoz, terapeuta de la Fundación Ana Bella. La mujer presuntamente apuñada en Sevilla por su expareja ya había sido maltratada por su exmarido, que actualmente está en prisión y tiene una orden de alejamiento de ella.
“Estas mujeres tienen unos patrones de conducta inculcados que les pueden llevar a otra relación de maltrato”, sostiene Muñoz, que insiste en que la clave para salir de ese círculo vicioso y horrible es el “empoderamiento de la mujer”. En ello trabajan en la Fundación Ana Bella, cuyo objetivo fundamental es que las mujeres que recurren en su ayuda sepan que salir de la violencia machista es posible y que solo ellas pueden hacerlo con su actitud.
“La mujer que sufre violencia de género no es una víctima, es una superviviente”, remarca la terapeuta que asegura que “cambiar de vida es posible” y que el primer paso para conseguirlo es admitir que “es ella el agente de cambio”. Si una mujer tiene “fuerza de voluntad” podrá salir de la violencia machista, incluso en los casos como este de Sevilla, donde las circunstancias no parecían las más favorables.
La mujer, asesinada ayer en presencia de uno de sus hijos, vivía en uno de los barrios más desfavorecidos y conflictivos de la capital hispalense, 'Los Pajaritos'. Además, seguía viviendo en el mismo edificio que su presunto verdugo. Lo había denunciado pero no tenía orden de alejamiento. Él tiene antecedentes por abusos, cuatro denuncias previas de parejas anteriores por violencia de género y una orden de alejamiento de otra mujer de Córdoba.
El entorno socio económico influye pero no es determinante. Lo realmente importante es que la mujer se sienta “persona, no víctima. La mujer debe conseguir ver que ella es un agente de cambio”.
El presunto asesino de Los Pajaritos está a la espera de pasar a disposición judicial. Los hijos de la mujer están bajo tutela de la Junta de Andalucía mientras localizan a algún familiar que pueda hacerse cargo.