Encontrar el cuerpo de Marta Calvo sigue siendo la principal prioridad para la Guardia Civil. En paralelo, la investigación sigue avanzando. La UCO y la Policía Nacional han confirmado a NIUS, que están buscando posibles víctimas de Jorge I.P. en toda España. Revisan casos de mujeres que hayan sido drogadas en “fiestas blancas” de sexo y cocaína, el modus operandi del asesino confeso de Marta Calvo. “Era muy insistente. Tenía mucha cocaína. Yo nunca había visto tanta. Me decía que me metiera. Yo no quería, pero era muy agobiante y al final lo consiguió”. Es el relato de María (nombre ficticio). Una de las víctimas de Jorge I.P. En una entrevista concedida a NIUS, la joven cuenta que “te ponía la cocaína con el dedo en la boca y quería meterme por mis partes. Él lo que busca es que te quedes inconsciente y violarte”.
En su confesión ante la Guardia Civil, Jorge I.P. contó cómo Marta Calvo falleció después de consumir gran cantidad de cocaína. Idénticas circunstancias rodearon la muerte el pasado mes de Arliene, la mujer brasileña de 32 años que falleció como consecuencia de una sobredosis después de pasar la noche con Jorge. El encuentro se produjo en una casa de citas del distrito de Ruzafa (Valencia). La grabación recogida por unas cámaras de seguridad, permitieron a los investigadores identificar al hombre de origen colombiano, que huyó del lugar cuando la mujer falleció. Fue en un control de la Policía Local, donde un agente lo identificó y lo retuvo. Llevaba en su poder 7.000 euros y tres teléfonos móviles, aunque no pudieron detenerlo porque no había una orden contra él. Finalmente, Jorge I.P. declaró que la mujer comenzó a convulsionar, murió de forma repentina, se asustó y huyó del lugar. La investigación determinó finalmente, que se trató de un fallecimiento accidental y no presentaron cargos contra él. Ahora el juez que lleva el caso ha reabierto las diligencias para profundizar en la investigación.
El otro caso que ha reabierto el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional es el de Lady, una joven colombiana que fue encontrada muerta en otra casa de citas en una avenida de las afueras de Valencia. Según ha confirmado la policía a NIUS, existen pruebas que vinculan a Jorge con esta muerte.
Una de las mujeres que han presentado denuncia contra Jorge es María. En su relato ante la Guardia Civil, aseguró que tuvo una cita con él. “Me metió cocaína. Perdí la consciencia y no recuerdo nada. Cuando me desperté, me dijo que había convulsionado y perdido el conocimiento”. En este caso, María salvó la vida. Es consciente de que tuvo suerte. “Yo podría ser Marta Calvo”, repite aterrorizada.
Cuatro víctimas con un denominador común en las que se repite el mismo patrón. En este sentido, el subdelegado del Gobierno en Valencia, Roberto González Cachorro, ha aclarado que las investigaciones contra el sospechoso por la desaparición de Marta Calvo descartan por ahora la hipótesis de que se trate de un asesino en serie o múltiple: "tienen que confirmarse muchísimas más cuestiones, yo sé que ha habido alguna noticia en ese extremo, pero hay que decir que todavía no estamos en esa fase".
Lo que también se continúa investigando es la desaparición de la de la joven Wafa. Son llamativas las coincidencias con la fecha desde la que no se tiene noticias de la joven de 19 años y el lugar donde se le perdió la pista, Carcaixent. Curiosamente el mismo municipio donde Jorge I. Palma se entregaba a la Guardia Civil el pasado 4 de diciembre. Hasta el momento no se ha confirmado una vinculación directa del colombiano con el caso, aunque tampoco se descarta. "Hasta estos momentos no hay ningún indicio que relacione un hecho con otro. A pesar de que haya una coincidencia muy llamativa de la zona en la que se ha entregado el supuesto agresor y la desaparición de esta otra joven", ha señalado González Cachorro.
Ya en 2008, Jorge fue detenido cerca de Brescia (Italia) cuando transportaba nueve kilos de cocaína de gran pureza en un Wolkswagen Bora. No iba sólo, le acompañaba su abuelo Efraín Valerio y un tercer socio rumano. Tenía 26 años. Tras pasar por la cárcel italiana retomó su actividad criminal. De hecho, Jorge fue detenido en octubre de 2017 en Pamplona en una operación antidroga coordinada y orquestada por la Policía Foral de Navarra. Sucedió poco después de que transportase un alijo de cocaína en coche desde Valencia.
Antecedentes que explicarían el hecho de que tanto el alquiler de la casa de L’Ollería como la de Manuel, estuvieran a nombre de su madre. Esta última, en la que se perdió el rastro de Marta Calvo, utilizada para trapicheos y sexo. Unos hechos que han sorprendido a unos vecinos con los que se relacionaba poco pero de forma excesivamente cortés y que podrían no haber empezado con Marta.
Mientras las líneas de investigación van ampliando las vías en las que podría estar implicado Jorge I. Palma, continua la búsqueda de los restos de Marta Calvo. Un trabajo que se está llevando a cabo tanto en el entorno del municipio valenciano de Manuel, donde se rastrean todos los alrededores por tierra, agua y aire y donde participa la Guardia Civil y la Unidad Militar de Emergencias. Una búsqueda que se ha trasladado también al vertedero de Dos Aguas, el lugar donde van a parar los residuos de diferentes municipios de la provincia de Valencia después de que Jorge Ignacio confesara haber arrojado los restos a varios contenedores de basura.