La fascinación por el desastre marítimo más famoso del siglo XX, en el que murieron más de dos tercios de los 2.224 pasajeros y tripulantes, continúa todavía y la curiosidad por visitarlo no cesa. Es por esto que una empresa está dispuesta a ofrecer a los turistas la oportunidad de explorar el naufragio del Titanic. Estas primeras expediciones de ocho días estarían previstas para 2018, aunque ya se habla del verano de 2019. Aunque no es un viaje para todos los públicos, ya que el billete de ida y vuelta alcanzará los 97.400 euros por persona.
Serán nueve los turistas que podrán formar parte de esta experiencia de lujo con la que visitarán el fondo del Océano Atlántico en submarino. Además podrán echar un vistazo a la nave hundida hace ya 105 años y que se encuentra a unos 4.000 metros de profundidad.
Según informa Mirror, los principales turistas que disfrutarán de esta expedición son científicos, arquólogos y aficionados a la historia del Titanic con el dinero suficiente para pagar el billete.
El submarino llevará a los turistas por encima de la cubierta del barco hundido, mostrándoles lugares como su famosa gran escalera.
La firma de firmas de viajes de lujo que está detrás este increíble viaje, Blue Marble Private, promete una "experiencia épica única en la vida...". Y aseguraron que son muchas menos las personas que han visitado el Titanic que el espacio o el Everest. "Esta es una experiencia única en la vida y una expedición diseñada sólo para aquellos con un espíritu verdaderamente aventurero".
El viaje de ocho días con Blue Marble sale desde Terranova (Canadá). Desde allí un helicóptero llevará a los turistas a un barco de apoyo y pasarán los primeros días recibiendo instrucciones acerca del funcionamiento de la nave.
Después de estas sesiones de orientación, los pasajeros podrán ayudar a la tripulación a planificar una inmersión, operar el sonar y utilizar el sistema de navegación submarina. Finalmente, en el tercer día los turistas –de tres en tres- entraran en el submarino, hecho de titanio y fibra de carbono, para comenzar su viaje a las profundidades del Océano.
Aunque quizás éstas podrían ser las últimas oportunidades para poder conocer el Titanic. Un estudio de 2016 descubrió que la existencia de una "bacteria extremófila" podría acabar con lo que queda del naufragio en tan solo 15 o 20 años.