El 98% de los vecinos de Potro, todavía en Zamora, a favor de adherirse a Galicia
A la entrada al pueblo, en el pueblo, en los balcones de las casas, y hasta abrigando a los niños, que a 1.200 metros y refresca, en Potro, digamos todavía en Zamora, se respira Galicia, “si, prefiero ser galega, que no zamorana”, nos dice una vecina. Se respira, y se canta, en la plaza del pueblo, casi todos los habitantes, 179, entonan al unísono cantos como, “¡si no nos atienden, queremos ser galegos!”, o “¡carretera ya, carretera ya!”. Y se refieren a la ZA-102, muy deteriorada, la única forma de salir de la localidad, y encima hay que entrar en Orense, ya que no hay otra forma, su “salida natural es hacia Galicia”. 11 años hace que la Junta de Castilla y León se comprometió a arreglarla, “en invierno esto es un crimen, aquí te encuentras con un coche y a lo mejor tienes que hacer 3 kilómetros marcha atrás”, nos apunta otro vecino. La carretera, el empleo, y el dicen, total abandono que sufren, les ha llevado a votar en un referéndum, sin ninguna validad jurídica, que ha tenido un resultado del 98% a favor de dejar de pertenecer a Zamora, y adherirse a Orense. “porque estamos más identificados con Galicia, tanto a nivel de lengua, aquí se habla el gallego, a nivel de costumbres, a nivel de relación, tenemos más conexión”.
Y mientras los niños, ajenos a este fervor gallego, juegan en un parque, que quien sabe si dejará de ser zamorano.