Los vecinos del bloque del distrito madrileño de Chamberí donde anoche fue asesinado un hombre de 62 años supuestamente apuñalado por su hijo vieron al presunto agresor tratando de huir ensangrentado tras una fuerte discusión, aunque fue interceptado por la Policía a pocos metros del domicilio.
La Policía Nacional detuvo sobre las 22:30 horas de ayer sábado al presunto parricida, de 25 años. El arrestado fue trasladado con custodia policial al hospital Clínico para su evaluación psiquiátrica.
Marta, una vecina que estaba trabajando en esos momentos, ha explicado a Efe que escuchó gritos y se asomó al patio interior, donde ya se habían asomado varios vecinos que comentaban que en uno de los pisos había una pelea y que podían haber matado a alguien.
Al estar en el bajo abrió la puerta a la Policía y luego sus compañeros le contaron que el presunto agresor, joven y corpulento, había bajado las escaleras ensangrentado, en calzoncillos, y había salido a la calle, pero fue alcanzado por los agentes en las cercanías.
Ha precisado que no conocía a esa familia y no tenía constancia de que diesen problemas, ya que se trata de un edificio muy tranquilo, como el barrio.
Otro vecino, Miguel, ha relatado que escuchó ruidos fuertes, como de rotura de platos, en el piso superior al suyo y luego un joven ensangrentado bajó por las escaleras y fue arrestado por la Policía. No les conocía y nunca habían oído peleas o problemas en ese piso de arriba.
A la zona se dirigen agentes de Policía Nacional y un indicativo del SUMMA 112. Ya en el domicilio, los sanitarios vieron que el hombre tendido en el suelo tenía diversas heridas incisas por arma blanca, varias de ellas en el cuello, y realizaron tareas de reanimación ante su situación de parada cardíaca pero sin éxito, por lo que simplemente confirma el fallecimiento del varón.
Por su parte, desde Policía Nacional han explicado que el detenido fue trasladado por los agentes al Hospital Clínico San Carlos para su evaluación psiquiátrica.
Durante el estado de alarma se han producido otros parricidios, como el ocurrido en mayo en la localidad de Collado Villalba cuando un hijo mató a su padre a puñaladas mientras que en Manzanares El Real otro hombre mató a su madre también con un arma blanca.