Ashley Finley, de 25 años, y Dysney Sibbons, de 23, consideraron que era divertido tratar de quemar al roedor mientras trabajaban en el local de Cycle King en Bury St. Edmunds, Suffolk. Sin embargo, ocurrió algo que no esperaban: el incendio se extendió a un pub y restaurante cercanos, provocando un total de 1,8 millones de euros en daños, tal y como recoge Independent.
Parece ser que lo empleados utilizaron algún tipo de combustible para prender fuego al ratón, algo que el juez David Pugh describió como "un acto de pura estupidez" y añadió que la pareja "planeaban divertirse para aliviar un día aburrido mediante la cremación de un ratón".
En cuanto el incendio fue detectado, se envió a doce equipos de bomberos para apagarlo poco antes de las 5 de la tarde del 29 de septiembre de 2017. El hecho vuelve a ser noticia noticia porque la pareja va a ser sentenciada el próximo mes de junio.