El riesgo inminente de atentado que infundía el gobierno este miércoles ante la inestabilidad que se vive al norte de Mali no ha provocado el efecto deseado. Las personas que viajan al Sáhara para ver a los niños y niñas a los que acogen en verano y a sus familias mantienen que “es un compromiso que pesa más que la alerta lanzada por el ministro de atentado inminente”.
Un grupo de unas 60 personas, entre cooperantes y familias, salía este viernes por la mañana del aeropuerto de Madrid Barajas rumbo a Argel para después llegar a Tinduf.
Esta noche de viernes sale otro vuelo desde Bilbao con 120 personas. 20 de los ocupantes adolescentes que tenían previsto viajar sí se quedarán en tierra por precaución.
Pese a la amenaza de Estado Islámico del Gran Sáhara está previsto que cerca de 300 personas viajen este fin de semana camino a Tinduf.
Las ONG españolas mantienen su trabajo a pesar de estas amenazas e infunden tranquilidad a todos los voluntarios solidarios que viajan a visitar a los pequeños saharauis. “Yo acabo de llegar de los campamentos y hay total normalidad. Hemos hecho un Festival de Cine y no ha ocurrido nada, al contrario, es totalmente seguro" declaraba Pepe Taboada, presidente de Asociaciones Solidarias con el Sáhara (CEAS Sáhara) el pasado jueves.
Según los servicios de inteligencia las elecciones en Argelia y el congreso del Frente Polisario en las próximas semanas hacen que la zona sea ahora peligrosa.
Sin embargo, Asuntos Exteriores no ha tomado aún la medida por la que optó en el año 2012 de evacuar a todos los cooperantes españoles por el riesgo terrorista.