Las autoridades del País Vasco han dado por terminadas las labores de búsqueda del cuerpo de Joaquín Beltrán después de 15 meses en los que no se ha podido encontrar ningún rastro del trabajador desaparecido junto a Alberto Sololuce en un derrumbe producido en el vertedero de la localidad vizcaína de Zaldibar el 6 de febrero del año 2020.
El operativo llega a su fin sin haber alcanzado el objetivo de encontrar los restos del cuerpo de Beltrán. Más de un año y tres meses después de la tragedia del derrumbe y con 450.000 metros cúbicos de tierra rastrillados, ha concluido una operación de búsqueda que en el mes de agosto de 2020 logró encontrar el cuerpo de Alberto Sololuce, el otro trabajador desaparecido.
La decisión ha sido tomada por las autoridades del País Vasco y comunicada por el portavoz Josu Erkoreka que, en una rueda de prensa conjunta con la consejera de economía Arantxa Tapia, han reiterado sus condolencias a la familia de las víctimas.
Según la titular vasca de economía, el hecho de que el cuerpo de Sololuce pudiera ser encontrado demuestra que la metodología de búsqueda empleada fue la correcta. Un informe remitido por el Gobierno vasco asegura que las razone por las que un cuerpo fue encontrado y el otro no podrían residir en distintos factores.
La fuerza mecánica del derrumbe y el propio proceso químico del vertedero podrían haber hecho que uno de los cuerpos fuera posible de encontrar y el otro no. Sololuce, ha explicado Erkoereka, se encontraba en una caseta del vertedero en el momento del derrumbe y quizá haya sido por eso por lo que sí que pudieron encontrarlo en agosto.