Los taxistas de Barcelona condenan la violencia y siguen con las protestas
A primera hora de la mañana los taxistas, en asamblea y después de condenar las agresiones de ayer, han acordado realizar una marcha lenta, pero no por ello menos reivindicativa. 800 taxis partían de la terminal 2 del aeropuerto de El Prat de Barcelona ante la mirada de unos turistas abandonados con las maletas. El objetivo era colapsar la ciudad y lo han conseguido. La ronda litoral llena de taxis aunque no se han repetido los episodios violentos de ayer. La mayoría ha coincidido en que los hechos los realizaron un grupo minoritario de compañeros del gremio. Una treintena de coches quedaron destrozados. Los taxistas se quejan de que estas empresas les quitan el trabajo y están dispuestos de llegar hasta el final. Piden que se cumpla la ley que concede una licencia VTC por cada treinta taxis.