El Ayuntamiento de Madrid establecerá tarifas variables en los parquímetros en función de la calidad del aire y también de la demanda como una medida para reducir la contaminación. Además pondrá en marcha plazas de alta rotación con un máximo de 45 minutos de aparcamiento.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha anunciado esta medida en su primer debate del estado de la ciudad como regidor, que se celebra en el Palacio de Cibeles.
El área de Medio Ambiente y Movilidad trabaja en la nueva redacción de la nueva ordenanza de movilidad, que sustituirá el texto de la etapa de Manuela Carmena, que, por ejemplo, contiene el área de bajas emisiones Madrid Central, anulada por la justicia y que el Consistorio espera aprobar en el mes de enero, según indican
El alcalde de Madrid ha cargado contra el anterior equipo por un texto que contiene el área de bajas emisiones Madrid Central, anulado por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid y ha defendido que su equipo será más ambicioso, sin detallar, sin embargo, actuaciones en materia de limitación del tráfico, más allá de la recuperación de las calles para uso peatonal los fines de semana.
Por otro lado, Almeida ha adelantado que el Ayuntamiento va a prohibir que las bicicletas puedan circular por los túneles y sus accesos, y también el estacionamiento de estos vehículos y de los patinetes en las aceras, obligando a que aparquen en anclajes específicos.
También obligarán a que los repartidores en bicicletas usen casco, con el objetivo de proteger su "integridad física frente al tráfico rodado" pues el Consistorio madrileño considera que estos ciclistas "realizan un uso más intensivo de las calzadas".
Además, el consistorio va a poner en marcha un autobús nocturno a demanda como fórmula para resolver los problemas de movilidad de los jóvenes y recuperará las peatonalizaciones de calles durante los fines de semana puestas en marcha durante la desescalada de la pandemia.