En una conferencia de prensa en Sevilla, el soldado ha asegurado que el informe para decidir su no renovación se debe a que no ha aceptado proposiciones sexuales de un mando militar.
Linero ha acusado a Pedro Zerolo, secretario de Movimientos Sociales y Relaciones con las ONG del PSOE, de "usarlo políticamente" porque le aconsejó que su caso no trascendiera a la prensa después de ir con él en una marcha del 'Orgullo Gay', lo que asegura que también le dijeron desde el gabinete de la ministra de Defensa, Carme Chacón.
"Si el pecado mío es casarme porque soy gay, pues que nos ahorquen o que nos peguen palos como hacen en la India, y si no es así que tomen medidas", ha subrayado el soldado antes de asegurar: "Aunque hayamos conseguido muchos derechos, yo no los estoy recibiendo".
El soldado ha reiterado que en un despacho militar le pidieron que le hicieran una felación y ha agregado que ha recibido propuestas sexuales de un teniente coronel y de un capitán.
"Parece que soy la marica mala del Ejército", ha lamentado el soldado, que asegura que sus problemas empezaron cuando se trasladó con su pareja, también militar, desde Madrid a la base aérea de Morón de la Frontera (Sevilla).
En sus declaraciones, el soldado ha reconocido que es "un granito en el culo" del Ejército porque no se calla sus opiniones, y preguntado por el hecho de que su ex marido no tenga problemas lo ha achacado a que "algunos abdican y otros no".
Ha reconocido que tiene un representante porque son numerosos los medios de comunicación que le piden hablar con él y ha señalado que su objetivo es que se "tire de la manta" y se sepa todo lo que ocurre en el interior del Ejército.
Así, ha criticado que en el ámbito militar "hay mucho tío Paco dentro todavía" que "te da en la espalda y te dice que tienes una enfermedad y debes ir al médico".
Cuando denunció esta reiteración a su superior, una mujer joven, le dijeron que aguantara porque era un hombre mayor.
El Ejército del Aire, por su parte, asegura que el soldado no ha sido expulsado "tras dos años de amenazas, abusos y proposiciones dentro del Ejército" como ha denunciado, sino que no se le ha renovado el contrato por las evaluaciones desfavorables.
Fuentes del Ministerio de Defensa consultadas por EFE han explicado que a este soldado no se le ha renovado el contrato una vez que ha expirado porque las preceptivas evaluaciones sobre su servicio "han sido todas desfavorables".
El soldado ha criticado que le han prolongado "innecesariamente" y durante dos años el expediente médico que le abrieron, y ha afirmado que él tenía intención de no renovar su licencia militar aunque más tarde decidió que sí lo haría debido a la crisis económica.
Linero ha anunciado que denunciará laboralmente al Ejército porque le han "expulsado" estando de baja psicológica y ha asegurado que tiene numerosos testigos dispuestos a corroborar sus acusaciones de amenazas y coacciones.