1. Di 'no' al pan
Si eres de esas personas a las que le gusta mojar el pan en la salsa o simplemente acompañar cada comida con un trozo de pan, deberías plantearte dejar de comerlo si quieres perder peso. El pan contiene calorías innecesarias y es muy fácil quitar el hábito de comerlo: no lo compres.
2. El café, mejor solo
El café es uno de los mejores aliados por las mañanas, después de comer e incluso a media tarde. Si se trata de una de tus bebidas favoritas o lo necesitas para despejarte por las mañanas, no hace falta que prescindas de él. Simplemente, procura tomarlo solo. La leche y el azúcar o la sacarina engordan bastante.
3. Olvídate del alcohol
Esa cervecita después del trabajo o esa copa el fin de semana aportan muchas más calorías a tu organismo de lo que te puedes imaginar. Si quieres adelgazar y notar rápido los resultados, una buena opción para conseguirlo es no tomar alcohol porque son calorías completamente innecesarias.
4. Haz lo mismo con las bebidas azucaradas
Según explica Noticias24, el peor enemigo de la dieta son los refrescos. En cuanto dejas de tomarlos y los reservas para las ocasiones especiales, puedes evitar ingerir hasta 400 calorías diarias.
5. Come despacio
Al masticar detenidamente cada bocado, el estómago enviará antes al cerebro la señal de que está lleno, por lo que ingerirás menos cantidad de comida y no pasarás hambre.
6. Evita los restaurantes
Cocinar en casa es una de las cosas que más te ayudará a adelgazar. Esto es porque al comer en un restaurante o recalentar comida vas a ingerir muchas más calorías que si lo cocinas tú. Al prepararte tu propia comida eres más consciente de los ingredientes y las cantidades que utilizas.
7. Descansa lo necesario
Al dormir unas siete u ocho horas se queman unas 300 calorías y, por el contrario, si se descansa menos de lo que el organismo necesita, luego el cuerpo pedirá alimentos dulces, ya que se ralentiza la tasa metabólica.