Samuel Kwesi, superviviente del Villa de Pitanxo: "Vi cómo mis amigos se iban muriendo uno a uno"
Samuel Kwesi, marinero ghanés afincado en Marín, explica que "no llevaba traje de supervivencia" y saltó a la balsa "en vaqueros"
Los tres supervivientes del naufragio permanecieron durante cinco horas a trece grados bajo cero
Las familias de los marineros desaparecidos del Villa de Pitanxo reclaman al Gobierno que envíe un robot submarino
Los tres supervivientes del naufragio del Villa de Pitanxo, Juan Padín, su sobrino Eduardo, y Samuel Kwesi, fueron recibidos a pie de pista por el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, quien conversó unos instantes con cada uno. En ese mismo avión llegaban los cinco marineros fallecidos cuyos cuerpos han sido recuperados.
En las aguas canadienses de Terranova, y aprovechando la mejoría de las condiciones climatológicas, los pesqueros gallegos y portugueses que faenan en la zona donde se produjo el naufragio han seguido buscando a los doce marineros desaparecidos. Los supervivientes, que llegaron completamente agotados, han contado a sus familias que están abatidos y se encuentran durmiendo a base de pastillas.
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Samuel Kwesi: "Salté a la balsa en vaqueros"
Samuel Kwesi, marinero ghanés afincado en Marín (Pontevedra), ha sido capaz de verbalizar la tragedia y de narrar a sus allegados que "no llevaba traje de supervivencia, estaba en vaqueros. Salté a la balsa y a la deriva vi cómo mis amigos se iban muriendo uno a uno. Sólo podía pensar en que yo era el siguiente", mientras da gracias a Dios por seguir con vida, señala La Voz de Galicia.
A través de Facebook pudo hablar con su hermano y localizar a su mujer, Emilia, en Ghana. Le dijo que habían tenido un accidente, pero que estaba bien. Después de contarle lo sucedido, se puso en contacto con su familia española: "Solo llamé una vez porque no quería que me notaseis lo triste que estaba".
Samuel aún tiene las manos hinchadas y una sensación de frío que no es capaz de sacudirse. Era lo que repetía una y otra vez. Tendrá que someterse a un examen médico porque tiene la tensión muy baja, una de las secuelas que deja la hipotermia. Y es que los tres supervivientes estuvieron cinco horas a trece grados bajo cero.
Julio Torres, amigo de Samuel, asegura a Informativos Telecinco que "el frío les hizo irresistible el continuar. La enorme tristeza es cuando descubren que en la otra balsa no hay nadie". Mientras, Sara Prieto, pareja de otro de los supervivientes, añade que están casi sin dormir.
Los familiares piden enviar un robot submarino
El delegado del Gobierno en Galicia, José Manuel Miñones, ha señalado que "el compromiso firme" es el de seguir buscando a los marineros desaparecidos. La hija de uno de ellos, María José de Pazo, erigiéndose como portavoz de los familiares, ha pedido al Ejecutivo que envíe un robot submarino "para bajar a donde está el barco hundido". "Creemos que hay cuerpos allí", concluye.