El documento ha sido publicado por The Journal of American Collage of Cardiology y en él explican que desayunar poco o no desayunar duplica el riesgo de lesiones ateroscleróticas.
El grupo de investigadores, liderado por Valentín Fuster, estudió a más de 4.000 personas de una edad intermedia para controlarlos a largo plazo mediante las técnicas de imagen más innovadoras y que tienen como finalidad principal caracterizar la prevalencia y la tasa de progresión de las lesiones ateroscleróticas latentes y estudiar su asociación con los hábitos alimentarios, la actividad física, los biorritmos, las características psicosociales y la exposición a la contaminación.
Así, han observado que hay una mayor presencia del número de placas ateroscleróticas en aquellas personas que se saltaban el desayuno, tal y como recoge 'Las Provincias'.