La sal siempre ha estado relacionado con la presión arterial alta y los riesgos que esto conlleva para sufrir enfermedades cardíacas.
Sin embargo, este estudio es el primero de su tipo que vincula la sal con el aumento de peso, según ha publicado The Independent.
"Los resultados sugieren que el consumo de sal es un factor de riesgo potencial para la obesidad independiente de la ingesta de energía", se lee en las conclusiones del estudio.
Se cree que la sal afecta el metabolismo del cuerpo, porque altera su capacidad para absorber la grasa.
Los responsables del estudio de la Universidad de Queen Mary, aconsejaron analizar los resultados con precaución.
La profesora Susan Jebb experto en la dieta en el asesor del gobierno de la Universidad de Oxfordand, dijo que aunque la reducción de sal era importante, los resultados del estudio no ofrecieron pruebas concluyentes de que la reducción de sal podría ayudar a perder peso.
"No me gustaría que las personas se engañaran y que este trabajo llevara a pensar que la reducción de la sal reducirá su riesgo de obesidad o les ayudará a perder peso", advirtió la especialista.