La agente municipal de Barcelona Rosa Peral, condenada junto a Albert López por el conocido como "crimen de la Guardia Urbana", ha recurrido ante el Tribunal Constitucional (TC) la sentencia de 25 años cárcel que ratificó el Supremo por haber asesinado en mayo de 2017 a la pareja de ella en el marco de un triángulo amoroso.
Tal como ha confirmado a Efe su abogada, Olga Arderiu, ayer presentaron el recurso ante el TC, al que han solicitado que devuelva la causa a la Audiencia de Barcelona, que la condenó por un delito de asesinato, para que se repita el juicio al considerar que se le han vulnerado derechos.
En su recurso, al que ha tenido acceso Efe, la defensa de Peral pide que se suspenda cautelarmente la ejecución de la pena de prisión -donde permanece desde hace más de cuatro años y medio- para garantizar la tutela de sus derechos fundamentales "ya lesionados de manera irreparable" y se evite un perjuicio mayor a sus dos hijas.
Como ya esgrimió ante el Supremo, que ratificó el pasado septiembre la condena impuesta por la Audiencia de Barcelona, Peral asegura que "no mató a Pedro ni participó activamente en su muerte" y resalta que "no existen pruebas ni directas ni indirectas de tal extremo", por lo que el Jurado se "limitó" a su entender a "suponer" su participación en el crimen.
"Su actuación como mucho la podría convertir en encubridora del delito de homicidio cometido por Albert; debiéndose valorar la concurrencia de una eximente plena, incompleta o de una atenuante muy cualificada por miedo insuperable", apunta el recurso en la misma línea que esgrimió la defensa durante el juicio, en el que ambos condenados se incriminaron mutuamente. Peral pide también que se repita el proceso para que se admitan pruebas y testigos clave para su tesis exculpatoria y solicita que se impida que la actual esposa de su exmarido "declare sobre nada de lo que, según ella, dijo o hizo la hija mayor".
Además de ratificar las penas de cárcel, el Supremo confirmó en septiembre la condena en concepto de responsabilidad civil, por la que se les impuso el pago una indemnización de 450.000 euros al hijo de la víctima, 225.000 euros a su padre, 100.000 euros a cada uno de sus dos hermanos, y 10.000 euros a su expareja. De acuerdo con la sentencia, Peral y López se confabularon para asesinar al novio de ella, cuyo restos fueron hallados en el maletero de su coche, calcinado y abandonado en una pista forestal del pantano de Foix.
Con este fin, en la madrugada del 2 de mayo de 2017, drogaron o medicaron a la víctima y la mataron de forma violenta en la vivienda que compartía con Peral en Vilanova i La Geltrú (Barcelona), tras lo cual se deshicieron del cadáver y trataron de incriminar al exmarido de la agente.
El tribunal concluyó que se trató de "un plan previamente diseñado y ejecutado a una hora" de forma "alevosa" por parte de "dos personas que por su profesión están habituadas a solventar situaciones de confrontación física".