Los vecinos de Sada, La Coruña, permanecen sobresaltados por el robo con alunizaje a un restaurante. Los ladrones estrellaron un coche contra la puerta y huyeron en otro vehículo, que después abandonaron.
Ni las cámaras de seguridad, ni un ostentoso cartel advirtiendo de vigilancia las 24 horas han sido suficientes para disuadir a los ladrones. Equipados con pasamontañas y guantes dieron un golpe muy rápido arrasando con todo lo que les impedía dar el golpe para, al final, hacerse con un exiguo botín de apenas 600 euros, dejando destrozos que pueden llegar hasta los 12.000 euros en desperfectos.
La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación. Este mismo restaurante ya sufrió otro robo en 2015. Los residentes de la zona exigen más seguridad.