Una fiesta de Navidad en Noruega, un equipo de fútbol en Portugal: la variante ómicron, la última gran novedad del coronavirus, empieza a extenderse por Europa en medio de algunos brotes con síntomas leves, una transmisión rápida y vacunados entre sus afectados. En medio de ese panorama, países como Alemania registran cifras disparadas de contagios en el último mes y otros como Italia o Austria endurecen sus restricciones.
La nueva mutación multiplica por 2,4 el riesgo de reinfección según los primeros datos del Instituto Nacional de Enfermedades Comunicables (NICD), la agencia de salud pública de Sudáfrica. “Las pruebas […] sugieren que la variante ómicron está asociada a una capacidad sustancial de evadir la inmunidad de una infección previa”, han asegurado los investigadores en un estudio preliminar en el que todavía no han podido determinar la eficacia de las vacunas.
El mayor brote de ómicron en Europa hasta el momento ocurrió en Noruega, después de que 60 personas dieran positivo por coronavirus y al menos 13 resultaran contagiadas con la variante detectada en el sur de África. Según informaron las autoridades noruegas, el episodio está relacionado con fiesta de navidad. Uno de los asistentes había estado recientemente en Sudáfrica, pero todos estaban vacunados y presentaban prueba negativa.
El evento reunió a entre 100 y 120 personas en un restaurante de Oslo el viernes pasado para una cena navideña organizada por una empresa de energía solar. “Todos habían sido vacunados, ninguno de ellos tenía síntomas y todos se habían hecho las pruebas” antes de la comida, señaló Tine Ravlo, funcionaria de las autoridades sanitarias municipales, en declaraciones a la AFP.
“Todo se hizo conforme a la normativa y no se ha infringido ninguna regla”, agregó Ravlo, que detalló que ninguno de los positivos presenta síntomas graves. Por el contrario, los contagiados solo han tenido dolores de cabeza, de garganta y tos, según detalló la experta.
También son asintomáticos o desarrollan síntomas leves los 13 futbolistas del Belenenses que han resultado positivos en ómicron, de un total de 17 contagios. Uno de sus compañeros, el sudafricano Cafú Phete, había regresado de su país el 22 de noviembre tras disputar dos partidos con su selección.
El brote dio paso a un partido que sigue generando polémica en Portugal, ya que el Belenenses saltó al campo frente al Benfica el sábado pasado con apenas 9 jugadores porque ni la Liga lusa ni las autoridades sanitarias del país los suspendieron, incluso sabiendo que había un brote.
Al término del primer tiempo, Benfica ganaba 0-7, con un primer gol anotado a los 24 segundos. El duelo fue suspendido porque el Belenenses solo contaba con 6 jugadores de campo para afrontar el complemento. La Liga ha señalado al equipo, penúltimo en la clasificación, por no solicitar “formalmente” el aplazamiento, aunque antes del encuentro estimó que con al menos siete jugadores era posible jugar.
El Belenenses ha solicitado la repetición del partido, mientras que el sindicato portugués de futbolistas ha afirmado que, ante los brotes, “es imposible cumplir con ciertos compromisos”. Al margen de lo deportivo, las autoridades sanitarias tienen en el equipo la pista más importante para rastrear la variante ómicron en el país. Los jugadores, así como todas las personas que tuvieron contacto con ellos, están aislados en cuarentena.
La asistencia de una persona un concierto interiores en el OVO Hydro, un escenario deportivo y de espectáculos en Glasgow, podría explicar la expansión de ómicron en Escocia, según las autoridades sanitarias. Esa persona habría estado dos días antes del concierto en una función en un bar de la capital escocesa, el evento al que estaban ligados los primeros contagios.
“El número de casos de ómicron que se están notificando ahora en Escocia está aumentando, y los casos ya no están todos relacionados con un único evento, sino con varios orígenes diferentes”, dijo Nicola Sturgeon, la primera ministra escocesa.
“Esto confirma nuestra opinión de que ahora hay transmisión comunitaria de esta variante dentro de Escocia. Dada la naturaleza de la transmisión, esperamos ver un aumento de los casos, tal vez significativo, en los próximos días”, agregó la mandataria.
Mientras las autoridades sanitarias realizan un rastreo de los contactos del concierto, Sturgeon ya confirmó durante la semana que ninguno de los primeros nueve casos necesitó atención hospitalaria. Tampoco habían viajado al sur de África ni habían tenido contacto con personas que lo hubieran hecho recientemente.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido que ómicron se propagará como ocurrió con delta hace unos meses. “Podemos estar seguros de que esta variante se expandirá. Delta también empezó en un lugar y ahora es la variante predominante”, dijo el portavoz de la OMS, Christian Lindmeier, que pidió a los distintos países un examen riguroso de los datos y medidas de contención adecuadas.
Después de que los Países Bajos alertaran de que ómicron circula por Europa incluso antes del aviso de Sudáfrica, los brotes y positivos en el continente han levantado la sospecha de una transmisión ya comunitaria. En España, Baleares ha confirmado el séptimo caso del país mientras que Cataluña ha señalado que la variante está presente en sus aguas residuales desde hace dos semanas.
A nivel europeo, el aumento de positivos es sustancial y pasó de 59 registrados el 1 de diciembre a 109 el viernes, según el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC). “Todos los casos de los que se dispone de información sobre la gravedad eran asintomáticos o leves. Hasta ahora no se ha informado de ninguna muerte entre estos casos”, ha indicado el organismo, que sin embargo ha señalado que el número de infecciones es todavía muy bajo como para sacar conclusiones.