Objetivo: evitar el exceso de velocidad y los trucos que ya tenemos para saber dónde está el radar, frenar, y luego volver a pisar el acelerador. En las últimas semanas, se ha conocido el último método para controlar ese exceso de velocidad: los radares en cascada. Consiste en colocar un radar móvil y, pocos kilómetros después, otro radar fijo. Así, se captará a los conductores que reducen la marcha solamente al paso del radar y luego vuelven a acelerar.
El método se ha estrenado en Navarra. Según ha informado el portal Navarra.com, se utilizó sobre todo en la Semana Santa en la Comunidad Foral. Parece que los planes de la DGT son extender este tipo de radares a más comunidades autónomas y podrían ser utilizados en momentos pico de tráfico, como la operación salida de Semana Santa o el verano. Parece que estos radares en cascada han dado buen resultado tanto a nivel de prevención como de recaudación.
Javier Hernández, del grupo de comunicación de la Policía Foral, ya justificó en declaraciones a Eitb en su momento esta medida. "Siempre que consigamos que se reduzca el exceso será una medida positiva", defiende Hernández, que desvela que han 'cazado' a conductores a 200 kilómetros por hora.