La Dirección General de Tráfico (DGT) ya tiene listos los 20 nuevos radares que controlarán la velocidad en las carreteras españolas en la operación verano 2019 en la que se prevén 90 millones de desplazamientos, 1,5 millones más que los que se produjeron el año pasado, es decir, un 1,66% más.
El dispositivo especial de Tráfico comenzó el pasado viernes 28 de junio y se prolongará hasta el domingo 1 de septiembre, tiempo durante el que se pondrán en marcha una serie de medidas de regulación, ordenación y vigilancia del tráfico, con el objetivo de garantizar la seguridad de los ciudadanos en sus desplazamientos y prevenir cualquier riesgo posible.
Para estos dos meses, un total de 9.100 efectivos de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil (ATGC) controlarán las carreteras, 300 más que en 2018, quienes priorizarán la vigilancia en las vías convencionales, donde se produjeron la mayor parte de los accidentes mortales (76%) en julio y agosto de 2018.
También se instalarán 78 nuevos radares durante este año, de los cuales 20 ya están operativos desde el 1 de julio. Los 58 restantes, 15 de ellos de tramo, irán entrando en servicio conforme se tengan las certificaciones del control metrológico. Vigilarán también las carreteras 12 helicópteros y 11 drones.
Igualmente, se incrementarán los controles preventivos de alcoholemia, hasta los 900.000, cifra a la que habría que sumar las pruebas realizadas por las policías locales y autonómicas.
El dispositivo especial de Tráfico también incidirá en la vigilancia del uso del móvil al volante. Para ello, contará con todos los medios disponibles: helicópteros, drones, 216 cámaras de alta definición y vehículos camuflados.