Investigan si un fallo en el cierre de puertas del metro de Barcelona provocó el accidente de una pasajera
En el arriesgado sprint para cruzar la línea del metro Núria solo logra introducir la mano. Tras cuatro segundos las puertas no se abren y el tren emprende la marcha. Atrapada, la mujer de 63 años, intenta subirse a la plataforma pero resbala y es arrastrada y volteada hasta que un pasajero activa el freno de emergencia. El accidente se produje en 2015 en el metro de Barcelona. Tres años después Núria no puede liberarse de aquel suceso. Ahora se investiga si hubo problemas en el sistema de cierre. Se ha sabido que, aunque entre las puertas quede un hueco de dos centímetros y medio, el convoy puede arrancar. Una opción que los conductores, por aquel entonces, desconocían. Además, la muñeca de Núria supera esa medida y, aun así, el tren no se bloqueó. Un posible error que le ha costado la invalidez y ha dejado sus recuerdos atrapados en el andén.