{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
La capital catalana ha vuelto a arder por tercera noche consecutiva. Varias personas se han manifestado de forma violenta en contra de la detención de Pablo Hasél. Los incidentes dejaron varios contenedores en llamas y pintadas. Además, se lanzaron piedras contra los agentes de los Mossos d’Esquadra e, incluso, contra la sede de un medio de comunicación. Además, uno de los radicales golpeó la cámara del equipo de Informativos Telecinco.
La noche arrancaba con los gritos de los radicales que, paradójicamente, se manifiestan por la libertad de expresión, pero que destrozaban la fachada de la sede de ‘El Periódico’ con piedras y pintadas. Ahí, todavía estaban los trabajadores que, tras el cristal, asisten impotentes a la sinrazón de los manifestantes.
Un equipo de Informativos Telecinco grabó todo lo ocurrido no sin dificultades. En un primer momento, trataron de entorpecer el trabajo de los periodistas y, a los pocos segundos, uno de los exaltados golpeó con un mazo la cámara.
Incluso, uno de los manifestantes, advertía del ambiente que se estaba respirando. "Tened cuidado que hoy la gente está muy motivada", decía.
Las hostilidades contra los medios se sucedieron y de nuevo la misma persona volvía a golpear con el mazo una cámara. Esta vez era la de un fotoperiodista.
Lo que acompañó a esas lamentables imágenes es la triste rutina de esta semana: la del lanzamiento de piedras o las constantes barricadas que acaban siendo barreras de fuego. La furia contra los medios de comunicación y se sumó a la agresividad, de nuevo, contra las fuerzas de seguridad, contra los Mossos d'Esquadra.
Ls Mossos d'Esquadra detuvieron a ocho personas por presuntos desórdenes públicos, actos vandálicos y participación en lanzamientos de objetos contra la policía. Los disturbios se extendieron durante toda la noche a varias calles del Eixample, donde grupos de manifestantes quemaron contenedores y motos, causaron distintos desperfectos en el mobiliario urbano y levantaron varias barricadas.
El teniente de Seguridad de Barcelona, Albert Batlle, ha cifrado el viernes en entre 400 000 y 500 000 euros los daños que se han producido en el espacio público de Barcelona tras tres noches de altercados en las protestas por el encarcelamiento del rapero Pablo Hasel. Este balance incluye los daños a contenedores, el alumbrado, la señalización de la ciudad y el asfalto, pero no "daños a consecuencia del pillaje" a comercios, ha informado en una entrevista en Rac1