Se avecina una escasez mundial de condones por culpa del coronavirus, y es que el mayor fabricante a nivel mundial del popular producto anticonceptivo se ha visto obligado a suspender la producción como medida de prevención ante la pandemia.
Karex BHD, de Malasia, fabrica uno de cada cinco condones a nivel mundial, pero no ha producido un solo preservativo en sus tres fábricas en los últimos diez días debido al bloqueo impuesto por el gobierno del país para detener la propagación del virus.
Dicha medida ha ocasionado un déficit de 100 millones de condones comercializados por marcas como Durex. Además, esta empresa es la encargada de suministrar los preservativos distribuidos a sistemas estatales de salud, como NHS de Gran Bretaña, o por los programas de ayuda como el Fondo de Población de las Naciones Unidas.
Pese a que la compañía tiene previsto reanudar sus operaciones el próximo viernes, solo lo podrá hacer con la mitad de su fuerza laboral. "Llevará tiempo poner en marcha las fábricas y lucharemos por mantener la demanda a la mitad de su capacidad", declaró el director ejecutivo, Goh Miah Kiat.
“Vamos a ver una escasez mundial de condones en todas partes”, predice Miah Kiat, aunque su mayor preocupación no radica en la caída de las ventas: “Mi preocupación es que para muchos programas humanitarios en África, la escasez no será solo de dos semanas o un mes, puede durar meses”.
Malasia es el país más afectado del sudeste asiático, con 2.161 infecciones por coronavirus y 26 muertes. La cuarentena allí se mantendrá al menos hasta el 14 de abril. Los otros principales países productores de condones son China, donde se originó el coronavirus, India y Tailandia, que ahora están sufriendo un aumento de las infecciones.