Dicho producto, denominado Revidox, ha sido presentado hoy durante una rueda de prensa, en Madrid, en la que han intervenido los investigadores del CSIC Juan Carlos Espín y Francisco Tomás, éste último además es presidente del CEBAS-CSIC, acompañados de Pedro Tocabens, portavoz del laboratorio cien por cien español Actafarma, responsable del desarrollo comercial del producto.
Según Tocabens, este producto representa claramente "un avance mundial" contra el envejecimiento y para la prevención de importantes problemas de salud; se ha demostrado que "la ciencia no sólo da años a la vida sino vida a los años", ha añadido.
El tratamiento con Revidox consiste en la ingesta diaria de una de estas cápsulas, que tiene un precio, cada una de ellas, ligeramente superior al euro, y que se venden en cajas de treinta, y debe tomarse como complemento de una dieta sana y equilibrada.
Aparte de prolongar la vida celular y actuar por ello, como elixir contra el envejecimiento, lo que repercute no sólo en el rejuvenecimiento de la piel, sino también en beneficio del resto de órganos (corazón, pulmones, estómago), este complemento alimentario reduce los problemas cardiovasculares y previene del cáncer, además de resultar eficaz frente a procesos inflamatorios, entre otros muchos, han asegurado los participantes en la rueda de prensa.
Los efectos de estas cápsulas se consiguen gracias a la aplicación de un método descubierto por científicos del CSIC que incrementa hasta 2.000 veces los beneficios del resveratrol, una sustancia que está presente en la uva, y por tanto, en el vino.
El resveratrol ha demostrado tener un claro papel favorecedor de la longevidad de los organismos, porque activa las sirtuinas (genes de la longevidad), unas proteínas reparadoras de los daños celulares causados por el paso del tiempo, según los resultados demostrados en infinidad de estudios científicos.
La gran novedad en este caso es que los científicos han conseguido concentrar en una sola cápsula la cantidad mínima efectiva de resveratrol para el consumidor, teniendo en cuenta que la presencia en la uva de esta sustancia es mínima y muy variable, incluso en una misma especie, debido a que sus niveles de concentración dependen de muchos factores, en su mayoría ambientales.
La técnica descubierta por los investigadores del CSIC permite activar en muy grandes cantidades los efectos del resveratrol, a partir de la exposición de las uvas cosechadas a rayos de luz ultravioleta, de modo que éstas responden produciendo mayores cantidades de resveratrol, como realizan normalmente de forma natural para defenderse de cualquier agresión, en este caso provocada por los investigadores.
Para ser inducida la síntesis de estos compuestos en la uva cuando aún está viva, recién cosechada, ésta se pasa por un túnel con una serie de luces ultravioleta durante un tiempo muy corto, de unos segundos, ha explicado Espín.
La ingesta de Revidox, un producto fabricado en concreto con uva garnacha y monastrell, carece de efectos secundarios, como ha sido demostrado después de haber pasado el producto por infinidad de controles, por parte de la comunidad científica y autoridades sanitarias, según sus responsables.
Por ello, han añadido, no está contraindicado su consumo por parte de ningún sector de la sociedad, pese a que se aconseja que se evite en segmentos de la población más sensibles como los lactantes, niños o embarazadas.