El índice de solvencia familiar medio en España, que ha elaborado por primera vez la OCU, se sitúa en 46,2 (sobre 100). Por debajo de un índice de solvencia de 33,6 podemos hablar de pobreza y ahí están según esta organización casi el 10% de los hogares, mientras que están en una situación más acomodada los hogares a partir de un índice de 53,5. Así, según esta encuesta hecha pública por el Día Mundial del Consumidor, el 9% de familias españolas vive en una situación de pobreza porque tienen muy difícil o imposible hacer frente a cualquier tipo de gasto cotidiano.
Según el estudio, las familias con un mayor riesgo de pobreza son aquellas formadas por un adulto con hijos a su cargo (índice 33,7), así como las parejas jóvenes sin hijos en las que uno de los miembros está en situación de desempleo.
Por Comunidades Autónomas, las más pobres son Baleares (42.4), Andalucía (43.2) y Canarias (43.3) que cuentan con el índice más bajo de España, mientras que Navarra (56.6), Extremadura (52.5) y Cantabria (52.2) se sitúan a la cabeza del ranking.
El gas, la electricidad y el agua son los gastos más importantes, según la encuesta, seguidos por los de salud o alimentación. En este sentido destaca que el 30% no puede ir al dentista y el 9% no puede comprar alimentos básicos como carnes y pescados.
Los gastos educativos también se encuentran entre los más necesarios. La educación superior o universitaria, que es la más costosa, es muy importante para un 59% de hogares.
El ocio y el tiempo libre tienen es menos importante en los hogares españoles. Comprar un libro, salir al cine o comer en un restaurante solo son considerados muy importantes por una minoría.
La encuesta pone de manifiesto que, a pesar de que un 25% de hogares españoles están en una situación de confort económico, apenas el 6% reconoce que puede ahorrar sin esfuerzo. A un 79% les resulta difícil, muy difícil o imposible ahorrar. Lo peor es que los encuestados creen que esta situación tenderá a empeorar durante 2019.